REAL MADRID-FUENLABRADA

Diagné: "Si Llull viene a por mí, yo voy a por él y a ver qué pasa"

El pívot, cedido por el Barcelona, se mide al Madrid: "Voy a intentarlo todo. Si nos tenemos que pegar unas hostias, nos las pegamos".

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Diagné: "Si Llull viene a por mí, yo voy a por él y a ver qué pasa"
EMILIO COBOS DIARIO AS

Moussa Diagné (06/03/1994, Guediawaye, Senegal) es una de las referencias del Montakit Fuenlabrada, que hoy juega en el Barclaycard Center el derbi contra el Real Madrid (12:30, MD2). Canterano del club madrileño, ahora se encuentra cedido por el Barcelona, que lo fichó la pasada temporada.

Randolph, Ayón, Felipe… el panorama se presenta difícil para usted hoy...

Les respeto mucho porque son muy buenos jugadores, los mejores pívots de Europa. Va a ser un partido difícil, pero todos saben cómo somos: un equipo que va a tratar de ganar luchando hasta el último cuarto.

¿Se llevaría a alguno de ellos al Fuenlabrada?

Los tres son magníficos. Sinceramente, los ficharía a todos.

Este Madrid parece intratable, ¿qué tendrá que aportar para detenerlo?

Está en un buen momento y jugando bien. Tengo que estar concentrado y hacer mi trabajo, nada más y nada menos.

Además de esos nombres en la pintura, Sergio Llull llega en un momento increíble. ¿Es el mejor jugador de Europa ahora mismo?

Es un gran jugador y es muy difícil de defender, pero si viene a por mí, yo voy a ir por él, y a ver qué pasa. Si mete una bandeja en mi cara, bien; pero si puedo hacerle un tapón…. Tira bien, ataca aun mejor a los grandes, saca faltas... Hay que estudiar cómo defenderlo, cómo lo voy a defender para que no esté cómodo. ¿Es el mejor? Eso os lo dejo a vosotros.

El Fuenlabrada no está tan fino como la temporada pasada

Con ocho jugadores nuevos cuesta algo más, pero estamos mejorando y confió en mis compañeros y en el entrenador. Además, el resto de equipos no nos lo va a dejar tan fácil por lo conseguido el año pasado. Ahora, cada rival dice: 'cuidado, son un buen equipo'. Nos dan importancia. Por ello, cada partido es difícil, duro.

¿A qué le recuerda marzo de 2010?

Fue cuando llegué a España. El 22 de marzo a las 6:15 de la mañana aterricé en Barajas. Fue un día triste para mí por dejar a mi familia. Vine solo, no conocía el idioma... esas cosas cuestan, pero al final valió la pena.

A pesar de dedicarse al baloncesto, lo suyo era el fútbol

Era portero y después me metí en el baloncesto por casualidad a los 15 años.

Afirmaba en una entrevista que era mejor que Casillas...

Sí, lo decía como una broma (ríe). Era bueno, pero tampoco pensaba llegar muy lejos en fútbol porque en esa época también trabajaba. Además, siendo futbolista en África cuesta salir y más todavía siendo portero.

¿Dónde trabajaba?

En la zapatería de mi tío. Cuando voy a Senegal en verano le sigo ayudando.

¿Qué le costó más al llegar, el idioma o el frío?

Las dos cosas (ríe). Llegué en marzo y estaba muerto de frío y me decían 'todavía no has visto lo que es el frío'. Me tenía que poner dos, tres abrigos porque estaba muerto de frío. Y con el idioma… al principio no sabía qué me decían el entrenador y mis compañeros hacían gestos para comunicarse conmigo. Era muy difícil.

Está en el Fuenlabrada cedido por el Barcelona, equipo que le fichó la temporada desde el propio Fuenla, ¿algo de la rivalidad Barça-Madrid le enseñarían?

No. Allí son buenos tíos y no me enseñaron nada de eso. Defiendo al Fuenlabrada y juego igual contra cualquier rival: con intensidad y carácter. La gente sabe que ese es mi juego. Además, todo el mundo sabe que no va a ser difícil: es un derbi madrileño

Muestra mucho carácter dentro de la cancha

Para mí, cada rival es el enemigo y voy a intentarlo todo para sacar el partido. Si nos tenemos que pegar unas hostias, nos las pegamos, pero después nos saludamos, hablamos y si nos llevamos bien, nos vamos a tomar algo. Cuando estoy en la cancha hago mi trabajo, el que me ha traído hasta aquí y con eso no voy a jugar.

¿Con qué disfruta más con un tapón o un mate?

Ambos. Hacer un tapón o mate para ganar un partido es lo mejor que hay.

¿Qué tal su relación con Cuspinera? En algunos partidos han tenido diferencias de opiniones…

Nos llevamos bien. Es un buen tío, un buen entrenador, lo digo de corazón, no soy un tío falso. Me ha ayudado mucho. Si hago un buen partido es gracias a él y al resto de cuerpo técnico. Pero dentro del campo a veces te calientas y hablas de esto y de aquello. Es normal y pasa.

El Fuenla arriesga siempre con pívots desconocidos que luego triunfan como Batista, Ayón, Biyombo y, ahora, usted. ¿Cuál es el secreto?

Apuestan mucho por los canteranos, algo que nadie más haría. Cuando estaba en Torrejón nadie quería pagar lo que gastaba el Fuenla por mí. Como con Biyomobo o Ayón. Luego el resto de equipos corren hacia ellos para ficharnos. ¿Por qué el resto no lo hace como el Fuenla? Es un equipo humilde, pero apuesta por los jóvenes.

¿Sueña con la NBA?

La NBA es la mejor liga del mundo y todo jugador sueña con jugar ahí y yo soy uno de ellos, pero ahora mi cabeza está en Fuenlabrada y además tengo contrato con el Barcelona. Estoy contento y no tengo prisa.