CONVENIO COLECTIVO

¿Cómo afecta el nuevo convenio de la NBA al baloncesto europeo?

Hay dos puntos claves en el acuerdo entre la Liga y el sindicato de jugadores que influyen directamente en el futuro del deporte en nuestro continente. Warriors-Cavs en directo

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Álex Abrines junto a Anthony Morrow.
GEORGE FREY EFE

El nuevo convenio colectivo de la NBA no afectará sólo al futuro de la Liga norteamericana, sino que también tendrá un efecto colateral sobre el baloncesto europeo y mundial ya que existen una serie de puntos que permitirán atraer a un mayor número de jugadores a tierras estadounidense. Hablamos del aumento en los salarios fijos, el crecimiento de las plantillas y la elevación del sueldo para los jugadores de la D-League. Cada uno de ellos tiene un impacto directo sobre el otro.

El aumento de los sueldos regidos por el CBA en un 50% permitirá atraer y mantener a muchos más jugadores. Estos cobrarán más en EE UU de media que en gran parte de Europa. El salario medio rondará los 8,5 millones, alcanzando los 10 en la temporada 2020-21, y el mínimo se establecerá en 800.000 dólares la próxima campaña (con aumento en las siguiente). Además, el ascenso del dinero percibido por los rookies de primera ronda (elección del 1 al 30) será un buen reclamó para las grandes joyas del básquet del Viejo Continente. Esta campaña, el número uno del draft (Ben Simmons) cobrará 4,9 millones de dólares y el 30 (Damian Jones), 976.000. Tras la firma del convenio, pasarán a ser de 7,3 y 1,4, respectivamente.

Este punto, más una mayor laxitud en los límites como el impuesto de lujo, permitirán el aumento de las plantillas de 15 a 17 jugadores. Estos dos extras estarán a caballo entre la NBA y la D-League, pero sus derechos permanecerán siempre ligados a la franquicia, no pudiéndose marchar a otro equipo o al exterior. Con estas nuevas incorporaciones, habrá entre 30 y 60 puestos de trabajo más en la NBA con sueldos, en principio, mejores que en el Viejo Continente.

El dinero no sólo crecerá en la primera división, sino que también lo hará en los filiales de la NBA. Los conjuntos de la Liga de Desarrollo (o D-League) tendrán un desembolsó hacia cada uno de sus jugadores de entre 50.000 y 75.000 dólares. No es una gran cantidad en comparación con las grandes cifras del campeonato norteamericano, pero si en relación a lo que se repartía antes: entre 19.000 y 26.000. Es decir, cualquiera podría probar suerte en Estados Unidos y, si falla, seguir con su carrera en el segundo torneo con la esperanza de tener una nueva oportunidad. Además, será otra puerta para acceder a la NBA. Jugadores como Ersan Ilyasova, Matt Barnes, Amir Johnson y Jeremy Lin han pasado por ese torneo y ahora tiene hueco en la mejor liga del mundo.