Cleveland Cavaliers presentó anoche su versión más peculiar en el Talking Stint Resort Arena de Phoenix. Jugaron a ser Dr. Jekyll y Mr Hyde y después de tener el partido en el bolsillo (57-77 en el tercer cuarto) un parcial de 13-33 para los jóvenes Suns dejó el partido igualado a 90 con un cuarto y poco más por jugarse. Había que bajarse al barro.

El tercer cuarto fue el que marcó el final del partido. Los Suns comenzaron a correr y su defensa asfixió a los campeones. TJ Warren anotó 10 puntos y la pareja de bajitos de los de Earl Watson sumó nueve más cada uno para firmar un parcial de 24-37 que acabó en empatar un duelo perdido. Devin Booker pondría el 90 iguales a 11 segundos del final del tercer acto con una bomba a tablero pero Kyrie Irving, no podía ser otro, le dio el +3 a los Cavaliers con un triple sobre la bocina. 

Con 73% de acierto en el tercero, el cuarto para los Suns se presentaba ilusionante pero nunca llegaron a igualar el choque más allá del 90 iguales. Cleveland se despegó al final con varias rentas que rozaron la decena de puntos gracias a los 12 tantos de LeBron que en el cuarto sí fue él mismo tras sufrir una impresionante defensa por parte de los Suns en el tercero.

En los Cavaliers no jugó Kyle Korver pero ya apareció en la lista de inactivos de los Campeones de la NBA.