El alero de los Wolves está, sin duda, en su mejor momento de la temporada. Después de sumar 41 sobre LeBron y compañía, Andrew Wiggins puso otros 40 encima de la mesa ante los Denver Nuggets, 40 puntos que sirvieron, además, para que su equipo se llevara una importantísima victoria en la pelea por la octava plaza de la conferencia Oeste. Los de Thibodeau lo tienen muy complicado (están a 3,5 partidos), pero una derrota ante los Nuggets hubiera sido casi definitiva en ese sentido.

Ricky Rubio (cinco asistencias, tres robos) y Juancho Hernangómez, la segunda pareja de españoles que se enfrentaba en la noche del miércoles (Abrines vs Willy), fueron espectadores de lujo en la exhibición del número uno del draft 2014. Ambos fueron titulares, superaron la treintena de minutos y venían de grandes noches (27+10 de Juancho vs Warriors y 16 asistencias de Ricky vs Cavs), pero no encontraron el ritmo adecuado (2/11 combinado) y acabaron con seis y tres puntos, respectivamente.

La noche fue de Wiggins de principio a fin. El alero, con una confianza demoledora (ha superado el 50% de acierto en sus cinco últimos partidos), se fue hasta los 23 en la primera mitad y acabó con 40 en un partido en el que demostró un gran nivel en el tiro exterior, su capacidad para acudir a la línea de personal (11 veces) y sus increíbles dotes atléticas: mate bestial marca de la casa sobre un Nikola Jokic (15+14+4, 6/19 en los tiros) que esta vez salió en el lado malo de la foto...

El debut de Plumlee

Karl-Anthony Towns también tuvo una buena noche para los Wolves (24 puntos y 19 rebotes: tiene pocas malas). Pero la gran noticia en la zona, además del enfrentamiento entre dos de los mejores interiores jóvenes del mundo (Jokic-Towns), fue el debut con la elástica de los Nuggets de Mason Plumlee. El ex de los Blazers fue titular junto al pívot serbio, disputó 33 minutos y acabó con 11 puntos y nueve rebotes. Jamal Murray, número siete del último draft (Kentucky), anotó cuatro triples desde el banco.