REAL MADRID 97 - VALENCIA 95

Pablo Laso: "Un amigo mío me dice que Llull es igual que yo"

El entrenador del Real Madrid dice que "competir hasta el final y no bajar la cabeza no se consigue en un día, sino que es un trabajo constante".
Real Madrid-Barcelona :Final Copa del Rey 2018

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Pablo Laso en un partido
EFE

Pablo Laso habló en rueda de prensa tras conquistar la Copa del Rey ante el Valencia.

Dedicado a dos personas. “Hoy ha nacido Axel Reyes, el hijo de Felipe, que se va a acordar toda la vida de este día. También me acuerdo de Xabier Añua, el entrenador que me hizo debutar en la ACB y al que homenajearon el viernes en Vitoria, pero al que no he podido ver.

La Copa. “Ha sido un título increíble. Tres partidos durísimos, en ningún momento tuvimos la sensación de poder romperlos. Nos exigieron al límite. Como competición la Copa es durísima y por eso resulta especial y los aficionados la viven así, con tanta intensidad. Era un partido en el que necesitábamos a todo el mundo, que todos jugaran y estuvieran metidos, porque nos iba a faltar cualquier gramo de energía. Pero a pesar de la fatiga, mantuvimos el estilo, tres partidos que se fueron a muchos puntos”.

La fe del equipo. “Como la de Sergio Ramos. Competir hasta el final y no bajar la cabeza no se consigue en un día, sino que es trabajo constante. Estoy muy orgulloso de mis jugadores. La labor de todos pasa por llegar al último minuto con opciones de ganar”.

El Madrid como club y el baloncesto. “Nosotros como club, o por lo menos yo como entrenador, he tenido la suerte de poder trabajar con dos amigos. He jugado con ellos. Uno es Alberto Herreros y el otro es Alberto Angulo. Puedo hablar de baloncesto con ellos sin parar durante días. Luego tenemos un jefe, Juan Carlos Sánchez, que si no fuera por él esto no sería posible. Y tenemos a un club, con Florentino Pérez a la cabeza, que ha apostado por el baloncesto. Siempre he trabajado con confianza y además cuento con toda la gente que rodea al equipo, a los fisios, al médico, a la gente de comunicación. En días como hoy me acuerdo de ellos, también de los aficionados, los que nos aplaudieron en pie cuando el Fenerbahçe nos eliminó de la Euroliga el año pasado”.

La confianza en Sergio Llull. “Uno amigo mío me dice que es igual que yo, que no me enfade con él cuando hace alguna cosa rara. Todavía me acuerdo del tiro que hizo pegado al banquillo, casi más que de los dos triplazos que metió al final. El equipo confía en él y él confía en el equipo, no es querer ser el héroe, es darle el pase a Randolph para que meta el triple ante el Andorra”.

Los resultados. “Sé cómo va el negocio, si pierdo me echan. Ya me han echado de otros equipos, pero hago siempre lo que creo, de lo que estoy convencido y no soy resultadista. He tenido a jugadores a los que he dicho que se dejaran de leches porque íbamos a ganar. ¿El futuro? A todo el mundo le gusta ganar, pero no se gana de boquilla. Hay que trabajar, y ese trabajo es el que nos va a llevar a hacer grandes partidos como el de esta tarde”.