Tras la humillante derrota de ayer viernes ante el CSKA Moscú (61-85) se habló de la necesidad de un psicólogo para la plantilla del Barcelona Lassa. Quizás también tendría que contratarse para la afición del Palau, resignada ya a todo y desmoralizada cuando se está a primeros de marzo.

Atrás han quedado los fracasos de la Supercopa, de la Copa del Rey y ahora en la Euroliga, ya sin opciones de playoff aún a falta de seis jornadas para acabar la fase regular, y con una plantilla rota, no solo por las lesiones sino también con la moral por los suelos. Pero Giorgios Bartzokas tiene más dos años y medio, al menos por contrato, por delante. Hay un sector que pide su cabeza y otro la de los directivos responsables de la sección, pero la política del Barcelona desde hace más de tres décadas es la de aguantar a los técnicos y, por lo general, los que no han acabado una temporada ha sido porque han presentado la dimisión.

Antoni Serra dimitió como técnico el 13 de enero de 1985, relevado por Manolo Flores. También dimitió el desaparecido Manel Comas, el 4 de noviembre de 1997 tras sufrir sus sexta derrota liguera y para ser relevado por Joan Montes.  El técnico de la primera Euroliga del club, Svetislav Pesic, dimitió el 9 de septiembre de 2004 en plena pretemporada por desavenencias con el entonces director general de secciones, Valero Rivera. El puesto lo ocupó Joan Montes, que también dimitió el 27 de febrero de 2005, relevado a su vez por Manolo Flores.

En cuanto a ceses solo se han producido dos: el primero fue Bozidar Maljkovic, cesado el 23 de noviembre de 1991 tras criticar al entonces mánager general Aíto Garcia Reneses. Su relevo fue, de nuevo, Manolo Flores. El segundo se produjo el 14 de febrero de 2008 y en la figura de Dusko Ivanovic, pasando su segundo, Xavi Pascual a primer entrenador estando en el cargo hasta la pasada temporada.

Cesar ahora a Bartzokas seria un desastre económico para el club ya que su contrato es de tres años a razón de un millón de euros por año. Por supuesto que en caso de cese se le tendría que abonar todo el contrato. Si dimitiera, algo que el técnico no piensa hacer, la indemnización estaría acordada. Y si desde la directiva se busca a Rodrigo de La Fuente como cabeza de turco, la misma tendría que reflexionar en que condiciones llegó el ex jugador azulgrana al cargo de manager general. En primer lugar, dos jugadores importantes con contrato vigente se iban a la NBA en verano: Tomas Satoransky y Álex Abrines. Y de la plantilla del año anterior Tomic, Oleson, Doellman, Lawal, Ribas, Eriksson y Navarro estaban bajo contrato, con lo que su margen de maniobra estaba totalmente limitado.

Giorgios Bartzokas llegaba como entrenador tras ocho años de Xavi Pascual en el banquillo. Con él también llegaban Tyrese Rice, Petteri Koponen y Víctor Claver. Y se renovó a Dorsey, que había acabo lesionado la temporada anterior. Lawal se lesionó en los Juegos de Río y era intervenido de la rodilla. Al parecer esta temporada ya  no jugará. A final de octubre, Pau Ribas se lesionó en el tendón de Aquiles y tampoco jugará en los que resta de curso. Después llegaba el fiasco de Dorsey y mientras, casi toda la plantilla iba sufriendo lesiones de mayor o menor importancia. Se fichó a Renfroe, que también se lesionó, y a Munford para dar aire a Rice. Y tras la salida de Dorsey llegó Vitor Faverani, que ha ido de más a menos.

Incluso ayer, en la derrota ante el CSKA, faltaban los lesionados de larga duración, además de Juan Carlos Navarro, convaleciente de una operación de apendicitis y que ya entrena, y Justin Doellman, que se lesionó en el sóleo de la pierna derecha el pasado 5 de febrero. El parte médico señaló diez días de baja y lleva ya un mes. Nadie ha dicho tampoco cuando volverá. Bartzokas ya dejó clara ayer su posición reconociendo que:"Estamos ya planificando la próxima temporada, si bien todavía hay mucho en juego en esta". ¿Se referirá a luchar por el título de la liga Endesa? En estos momentos su equipo es quinto en la tabla...