El Valencia se aferra a la 'Caldera Taronja' para clasificarse
Los taronjas tienen las bajas de Vives, Diot y Kravtsov pero se aferran al factor cancha para desnivelar a su favor la eliminatoria ante el Khimki, en el tercer partido de cuartos de final.
Después de muchos partidos, viajes, dos fases de grupos y dos duelos directos de cuartos de final, el Valencia Basket se juega el segundo de sus objetivos en la temporada (el primero lo rozó, la Copa del Rey), en tan sólo 40 minutos ante el Khimki (20:45, TDP). Cuando se clasificó para cuartos, con la vitola de mejor equipo del Top-16, los taronjas eran favoritos a todo. Pero en pocos días, a Pedro Martínez se le han ido cayendo hombres. Primero Diot, con fascitis plantar; después Kravtson, que dijo adiós a la temporada en el primer partido de la serie; y después Vives, el pasado domingo, en Vitoria, con un esguince de tobillo. Este es el panorama.
Y el Valencia Basket sabe que la victoria está a medio camino entre la épica y el baloncesto. Con sólo un base puro sano (Van Rossom), Sastre, Rafa Martínez y San Emeterio deberán actuar en algún momento de uno para dar descanso al belga. Adentro tampoco estará Kravtsov y un pívot con centímetros como Sokolov puede volver a hacer daño en la pintura. Dubljevic debe regresar al nivel que tuvo en la Copa, tras las malas actuaciones que tuvo en los últimos partidos. Shved volverá a ser la amenaza. El club ha hecho una llamada al público por redes sociales para calentar el choque con el hashtag #CalderaTaronja y a eso es a lo que se aferra.
Pedro Martínez también va en la misma línea. Y esta vez sí le da valor al factor campo. “Si este partido fuese fuera de casa, lo perderíamos. La importancia es mucha. Si este partido fuese en Moscú no tendríamos razones objetivas para pensar que podemos ganar, aunque siempre se puede ganar y se puede perder. Sí las tenemos es por el hecho de jugar en casa”, aseguró.
Además, Martínez desveló el ánimo del grupo: “Lo vamos a competir. Yo quiero hablar de los no lesionados, vamos a competir, a dar el máximo, debemos intentar ganar. Entrenamos, jugamos y vivimos para jugar estos partidos, somos unos privilegiados y debemos tener buen ánimo. Las dificultades son lógicas, podemos perder pero también sabemos que podemos ganar. Es un partido bonito de vivir, de jugar y de ganar”.