Una lanza en favor de Sacramento Kings, que no es cosa habitual. Sobre todo de Dave Joerger, que ha tenido que revisar sobre la marcha el plan para el que fue contratado por la franquicia californiana tras la salida de DeMarcus Cousins. Y sin un producto de Kentucky, otro: Skal Labissiere, número 28 del último draft (obtenido en una operación con los Suns, precisamente) arrasó Phoenix con uno de los mejores partidos de un novato en toda la temporada: 32 puntos, 11 rebotes… y 21 puntos solo en el último cuarto, en el que anotó los 16 primeros de su equipo en fila y ante un rival cada vez más cómodo en el tanking más puro y duro. La última noticia es que, con Brandon Knight (Kentucky) también fuera de juego, Eric Bledsoe (Kentucky…) no jugará (molestias de rodilla) en lo que queda de temporada.

Labissiere es un talento con problemas de dispersión pero que puede anotar de mil maneras si concentra toda su capacidad. Había jugado 52 minutos con los Kings antes del All Star Weekend, que se cerró con el traspaso de Cousins a los Pelicans. Sin él rey sol, el rookie haitiano ha entrado en la rotación y va exprimiendo sus minutos. Como Cauley Stein (otro de Kentucky) cada vez más productivo: 14 puntos, 11 rebotes, 5 asistencias, 4 robos y 4 tapones. Con ellos, Hield y lo que pueda venir en el draft (los Sixers pueden cambiarles la ronda) quizá haya un atisbo de futuro en una franquicia en la que este nunca parece llegar.

Los Suns (perdieron 101-107), otro equipo que ha caído en la más absoluta disfuncionalidad, también deshojan la margarita de la Regular Season mirando a un futuro al que se está sumando (también Kentucky…) Tyler Ulis (13 puntos, 13 asistencias) y en el que seguro tienen sitio Chriss (17 puntos, 7 rebotes) y por supuesto Devin Booker (exacto: Kentucky), esta vez 19 puntos y camino de ser el único jugador capaz de promediar 21 puntos por partido (está en 21,1) además de… Kevin Durant y LeBron James. No es mala compañía.