León es una lugar especial para la familia estudiantil. En la temporada 2007-08, el Movistar Estudiantes (en esos momentos MMT) salvó la categoría en el Palacio de los Deportes castellanoleonés después de un final de curso épico. Ahora, nueve años después, la misma ciudad y el mismo pabellón acogen de nuevo a los colegiales. Pero, esta vez, con un objetivo completamente diferente y con otros protagonistas: el Estu femenino juega allí la fase de ascenso que comenzará este jueves.

Las chicas de Fito González iniciarán su andadura contra el Pacisa Alcobendas (18:15), un viejo conocido con el que hubo tablas esta temporada. El viernes, el Joventut Les Corts será su rival (18:15). Mientras que frente al Aro, el anfitrión, se cerrará la fase de grupos el sábado (17:15). El partido ante las leonesas será especial para Natalia y Teresa López. Las dos hermanas se formaron allí antes de dar el salto a la capital. "Si soy sincera no es algo que me agrade, ya que para mí el Aros es mi casa y jugar contra tu gente de siempre, y sobre todo contra la entrenadora que me lo enseñó todo...no va a ser fácil. Pero a pesar de todo eso, mi club ahora es Estudiantes y voy a ir a muerte con mi equipo, sea quien sea el rival que haya enfrente", comenta Natalia a la web del club sobre un rival que cuenta con Itsaso Conde, una de las grandes perlas del baloncesto nacional.

Una vez finalizado ese terna de encuentros, y si acaban entre las dos primeras, las women in black disputarán las semifinales. Una victoria en esa ronda abriría las puertas de una máxima categoría que las ramireñas no catan desde la temporada 2009-10. El último intento de asalto desde segunda fue un año después, pero no hubo suerte: los cuartos fueron su frontera. "Tenemos muchas ganas de empezar ya. ¿Nervios? No muchos, la verdad. Puede que ya cuando lleguemos al pabellón y veamos el ambiente, pero por el momento, no", comenta Mariana González, capitana de un equipo que ha robado todo el protagonismo a Salva Maldonado y los suyos. Maru es la única supervivencia del equipo de 2011. "Cambia todo para mí (desde ese año hasta aquí). Mi situación en el equipo cambia: me siento mucho más importante, por así decirlo. Cambia que llegamos a la fase con mucha más confianza".

El reto es mayúsculo. Pero no imposible. Sobre todo tras un final de campaña en el que cuentan sus últimos 14 partidos por victorias. La segunda vuelta, impoluta: 13 de 13. Detrás queda las nueve seguidas del Snatts Femení Sant Adriá, también en León, pero en el otro grupo. Solo el poderoso Perfumerías Avenida, en LF1, tiene una racha más colosal: 20. "A principio de temporada no te lo imaginas. Pero una vez que va pasando la temporada... ¿por qué no?", señala la pívot. "Tampoco lo quieres pensar para no gafarlo. Es un premio que nos hemos ganado por el trabajo que hemos hecho y la constancia que hemos tenido".

A pesar de que el último precedente no es alentador, hay otro al que pueden agarrarse las colegiales. En 2008, tres años después de disputar su primera y única Copa de la Reina, el Estudiantes venció todos sus duelos de la segunda vuelta (13) y ascendió. Un buen presagio. "Nos ponemos el objetivo máximo y ese es ascender. Vamos a lucharlo desde el principio, a ir a por ello", asegura Irene San Román. ¿Será León de nuevo el talismán estudiantil? A ellas, confianza, no las falta.