Jugaban UCAM y Unicaja pendientes de su partido y del derbi vasco. El cuadro de Katsikaris necesitaba la derrota de Bilbao (que se dio) y la propia victoria (que no consiguió) para ser noveno. Tendrán que esperar los universitarios... Unicaja también hacía sus cuentas, tenían que vencer en Murcia (lo hizo) y que no ganara Baskonia (no fue el caso). Ambos, UCAM y Unicaja se quedan como están y pendientes de la última jornada sin depender de sí mismos.

Ganaron los de Joan Plaza (88-95) gracias a la efectividad de Jamar Smith y Nedovic, y también a su profundidad de banquillo. En el primer cuarto, los malagueños llegaron a clavarle 28 puntos al UCAM, que reaccionó en el segundo gracias a la entrada de Llompart. Con empate (46-46) se llegaba al descanso. En el tercer acto, bajo en anotación, se mantuvo la igualdad y el último resultó determinante gracias al acierto en el tiro libre de Omic o Nedovic. Benite se desató como anotador local y metió miedo a Unicaja en el último minuto, pero le faltó tiempo al equipo de Katsikaris. El UCAM, que quiere ser noveno y jugar la Eurocup, debe esperar a que Bilbao caiga el domingo en la pista de Herbalife y luego ganar en la cancha de Valencia. Unicaja lo tiene peor para lograr el factor campo en cuartos de final, que Baskonia caigan en casa con el Fuenlabrada y los malagueños batir al Betis en el Martín Carpena.