La última jornada de la Liga Endesa despejó todas las incógnitas pendientes: ya hay playoff. Madrid-Andorra, Baskonia-Gran Canaria, Valencia-Barcelona y Unicaja-Iberostar. Hubo algún baile de posiciones, con Baskonia y Valencia como protagonistas. El equipo vitoriano hizo los deberes para intentar acabar lo más arriba posible. Debía ganar, esperar una derrota del Valencia y remontarle el average (-29). Las noticias que llegaban desde la Fonteta eran buenas: el UCAM Murcia había salido como una bala y ese average parecía asumible también por el gran partido del conjunto baskonista. Tanto que al descanso, el Valencia caía a la tercera plaza (perdía por 7, 24-34), que le mandaba directamente a una guerra con el Barcelona, y el Baskonia subía a la segunda plaza (53-29) para medirse al Gran Canaria. El equipo taronja se repuso, pero el UCAM Murcia volvió a mandar en el último cuarto (57-58).

A eso de las 19:35, el Buesa Arena cerraba el telón con triunfo del Baskonia (103-66): +27 por una canasta de Víctor Moreno. En Valencia, los locales perdían por cuatro (57-61). Si caían por más de dos puntos serían terceros. Un triple de Campazzo aumentó la renta murciana a seis puntos en el último minuto y las esperanzas del Baskonia de evitar al Barcelona.  Al final, -3 para el Valencia (67-70).

El Herbalife Gran Canaria había ganado al Bilbao a mediodía (86-80) y le había mandado la presión al Barcelona, que podía descender hasta el séptimo puesto. Lo hizo durante un minuto, cuando el Obradoiro se puso por delante en el tercer cuarto (37-36), pero en seguida recuperó la compostura (71-76). Acabó sexto.

El Unicaja y el Iberostar no fallaban para conservar su cuarto y quinto puesto, respectivamente. El equipo malagueño mandó al hoyo al Betis (98-89), mientras que el Tenerife se hizo fuerte ante el otro descendido, el ICL Manresa (84-51). Ambos se medirán en cuartos.