El Fenerbahçe juega en casa esta Final Four, aunque lo vaya a hacer en el Sinan Erdem de Estambul (a unos 40 minutos en coche del Ulker Arena, su pista) y en otro continente. “Somos el único equipo que tenemos que viajar desde Asia”, bromeaba Zeljko Obradovic, entrenador del Fenerbahçe, equipo de la parte asiática de la ciudad. Unos playoff impolutos (3-0 ante el Panathinaikos a pesar de no tener ventaja de pista) y unas gradas teñidas de amarillo y negro lo convierten en el gran favorito en esta Final Four. Al menos para las casas de apuestas. Estas ya apostaron por Madrid, Fenerbahçe, CSKA y Olympiacos en la cita de Estambul a principios de curso y ahora eligen a los turcos como campeones (2,65 al euro apostado), aunque ha habido baile de nombres durante la temporada: el CSKA era el favorito al inicio de la Euroliga y el Real Madrid, líder de la fase regular, lo fue también algunas semanas.

“Comenzamos la temporada sabiendo que todos querían meternos presión, porque la Final Four era en Estambul y el Fenerbahçe tenía que estar ahí”, dice Obradovic que lleva tres presencias seguidas entre los cuatro mejores. Como ocurriera en la primera, en 2015, se mide al Real Madrid de Pablo Laso. “Hubiera firmado cualquier rival. El ambiente da igual, es una final. En las finales no eliges con quien juegas, llegas y luego hay que intentar ganarlas”, señala el vitoriano, cuatro Final Four (y el título de 2015), desde que aterrizó en el banquillo del Madrid en el verano de 2011. Laso no quiere hablar de favoritos: “No considero que lo seamos, pero tampoco nos veo inferiores a nadie. No creo que haya favoritos en esta Final Four”. Pero si el Madrid ganara en Estambul, los que apostaron por él recibirían cuatro euros al euro apostado, la segunda cuota más alta.

En la otra semifinal está el CSKA de Moscú, vigente campeón y un fijo en la Final a Cuatro: 14 presencias en 15 años. “Cuando juegas en el CSKA, no sientes alegría al clasificarte para la Final Four. Pierdes eso. Todos esperan que llegues allí”, reconocía Teodosic. Con un presupuesto superior a los 30 millones de euros, es el segundo favorito a alzar el título este domingo. Pero por poco. Que el equipo ruso repita título se paga a una media de 2,89.
El cuarto en discordia es el Olympiacos, que sufrió la gota gorda para deshacerse del Anadolu Efes, pero vuelve a estar entre los cuatro mejores: cuarta vez que lo logra en los últimos seis años y, como siempre, con la mujer de Spanoulis embarazada. Además, en todos ellos hubo enfrentamiento ante el CSKA con triunfo griego. El tapado. “El CSKA es el favorito y nosotros, la cenicienta. Durante estos años hemos demostrado un montón de carácter y hemos sido capaces de manejar situaciones difíciles. Nos toca una vez más”. Palabra de Sfairopoulos.