Draymond Green fue uno de los grandes nombres propios de un cuarto partido en el que el arbitraje salió mal parado y él, cómo no, fue el centro de la polémica. El ala-pívot fue de los más abucheados por el público que abarrotó The Q, un pabellón que celebró su expulsión... aunque esta no llegó a producirse. Todo se debió a un falta de comunicación entre la mesa y los tres colegiados del partido. "Algo diferente", así calificó su actuación. Acto seguido lanzó una pulla hacia los integrantes de la mesa, quienes no se percataron que la primera técnica señalada a los visitantes tuvo a Steve Kerr como destinatario y no a él mismo, como en un principio se había dado por hecho. "Sinceramente, no me fijo mucho en la gente de Cleveland. No parece ser la más inteligente", valoró.

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A sentenciar en el Oracle

Sus Warriors dejaron escapar la oportunidad de firmar el primer 16-0 de la historia y celebrar el título en la cancha de los Cavaliers. Algo que pareció no preocuparle en exceso. "Ya he ganado un título como visitante. Quiero saber qué se siente al celebrarlo en casa", destacó. Un Game 5 en el que no ve a Cleveland manteniendo el mismo nivel de acierto. "No creo que sean capaces de anotar 24 triples en el Oracle", concluyó. La respuesta, en la madrugada del lunes al martes (03:00, hora peninsular española).