El baloncesto enloquece

El baloncesto europeo anda metido en unas dudas existenciales, que ya veremos cómo acaba la cosa. Todo a raíz de que la FIBA se propusiera ante la Euroliga como organismo único para regir el baloncesto europeo. Y ¡oh, milagro! llueven los millones, aparecen patrocinadores y grupos de inversión, se aseguran plazas fijas a los equipos más famosos hagan lo que hagan, cuando precisamente está en debate que desaparezcan estos privilegios... El baloncesto ha enloquecido y, lo que es peor, se está creando una escisión que nada bueno puede traer. Lo aventuró Pedro Martínez, entrenador del Valencia, hombre de gran experiencia. “Quieren un corralito. Si estás dentro será estupendo; si estás fuera será una mierda”.

Es así de claro. Una competición cerrada que hará más poderosos a los ricos, y más parias a los pobres en las ligas nacionales. El Madrid, el Barcelona y el Baskonia tendrán plaza fija en Europa. ¿Qué pasará cuando jueguen en Málaga o Valencia? Sobre todo, porque los equipos de estas ciudades están demostrando tantos méritos como ellos para ocupar sus lugares. El Valencia está invicto en la Liga, ya ganó al Madrid, ayer volvió a hacer un partido espectacular en Bilbao... El Unicaja derrotó al CSKA en Moscú... En la Euroliga, por cierto, equipos del corralito como Madrid, Panathinaikos, Efes y Zalgiris se encuentran en posiciones delicadas, y el Maccabi y el Milán, extremas. Luego va el Madrid y se reivindica con el Manresa.