Ilusiones rotas. ¿Cómo se siente?

Estoy bien. He dormido bien, he entrenado bien y desayuné tranquilamente con mi mujer. No ha cambiado nada importante en mi vida.

Quizá sea eso lo malo: que todo sigue igual.

Quiero ser positivo. De momento estoy más tranquilo, porque ahora sé a lo que atenerme. Se acabó la incertidumbre y ahora he de centrarme en lo mío, que es jugar.

¿Siente que le ha fallado el Madrid?

A día de hoy no me siento defraudado por ningún bando. En su momento expresé mi deseo de jugar en el Real Madrid, pero sabía que eso estaba en función de que los clubes se pusieran de acuerdo. Imagino que cada cual ha hecho lo máximo posible por lograrlo, pero no ha habido suerte. No voy a convertirlo en una afrenta personal. No siento ningún rencor hacia el Madrid ni hacia el Estudiantes, aunque me hubiese gustado otra solución.

¿Qué ha fallado?

Quizá se tensó en exceso la cuerda. Cada lado defendió muy fuerte sus intereses. Yo mantuve esperanza de arreglo hasta el último momento, pero no se flexibilizaron las posturas.

¿Por qué pretendía marcharse del Estudiantes?

Cuestiones personales. Todo se ha llevado de forma muy profesional y no voy a desvelarlo ahora. Para mí siempre ha contado mucho lo personal, pero veo que lo profesional se ha impuesto. Lo asumo, pero yo no voy a cambiar. Seguiré dando importancia a lo personal, lo afectivo. Por eso he estado once temporadas en el Estudiantes.

¿Se siente respaldado por la plantilla colegial?

Sí: me han ofrecido apoyo desde el principio. No sé cómo llevaré la situación de aquí en adelante, pero está claro que el ambiente en el vestuario es fenomenal. Ningún problema. Es de la cancha hacia fuera donde tendré que lidiar con la situación.

¿Arrepentido de algo?

No, porque fue una decisión muy meditada, no producto de ningún calentón. Quizá me equivoqué al pensar que los responsables de las negociaciones cederían más, que lo personal contaría mucho.

¿Le gustaría desquitarse en un playoff contra el Real Madrid?

No hay nada que vengar. Intentaré que Estudiantes esté en el playoff, pero no porque quiera enfrentarme a ningún equipo en particular, sino por el interés de mi propio club.

¿Intentará de nuevo cambiar de equipo a final de temporada?

Sinceramente, no lo he pensado. Todo puede ocurrir.