El Pamesa resurge en el último instante ante un correoso Fuenlabrada

ACB | Pamesa 80 - Fuenlabrada 71

El Pamesa resurge en el último instante ante un correoso Fuenlabrada

El Pamesa resurge en el último instante ante un correoso Fuenlabrada

David González

Pamesa rompe la racha de dos derrotas consecutivas

El Pamesa Valencia se anotó la victoria ante Alta Gestión Fuenlabrada en un encuentro que sólo pudo enderezar a falta de cinco minutos para el final debido a la gran resistencia que puso el conjunto madrileño, que fue por delante durante más de la mitad del tiempo.

Con este triunfo, Pamesa rompe la racha de dos derrotas consecutivas y se aferra a la quinta plaza de la clasificación, mientras que Fuenlabrada se complica sus aspiraciones de permanencia.

En apariencia empezó con confianza el Pamesa, con un triple de Dejan Milojevic, pero no tardo el Fuenlabrada en evidenciar la realidad, que en los jugadores de Fotis Katisikaris pesaban las dos últimas derrotas sufridas de forma consecutiva.

De inmediato respondió el croata Marko Tomas con un triple y una penetración, dos acciones que dieron ventaja a su equipo y que sus compañeros se encargaron de conservar, especialmente el asturiano Saúl Blanco, muy acertado desde la línea de 6,25 metros.

Bajo los aros, el norteamericano de fuenlabrada Tom Wideman (diez puntos en el primer cuarto) le puso las cosas muy difíciles a Rubén Garcés, con lo que el equipo valenciano se quedó seis puntos por debajo (07-13), una desventaja que se mantuvo más o menos constante y que sólo se acortó gracias a acciones individuales de Fred House.

Lo dieron todo los locales

Los jugadores de Pamesa se exprimieron a fondo para recortar distancias, pero tuvieron demasiada prisa y descuidaron la contra de Fuenlabrada, una de sus mejores armas en el encuentro de hoy.

Sólo los artilleros locales fueron capaces de reducir la desventaja que su equipo arrastraba desde el primer minuto de juego. Rubén Douglas y Albert Oliver aprovecharon dos descuidos en la defensa visitante para endosar sendos triples con los que el equipo pudo encadenar un parcial de ocho a cero y ponerse por delante 36-34.

En este instante, Luis Casimiro llamó a consultas a sus jugadores y les dio indicaciones para no perder el hilo del encuentro, pues apenas faltaban cuatro minutos para el descanso y Fuenlabrada no podía echar a perder el gran trabajo realizado hasta el momento.

El juego se ralentizó, ambos equipos alargaron sus posesiones en busca de acciones cercanas al aro, aunque fueron José Antonio Paraíso y House quienes pusieron la pimienta en el final de este segundo cuarto con dos triples, uno para equipo, con lo que Pamesa se pudo marchar al vestuario dos puntos arriba.

Mismo quinteto incial

Tanto Pamesa como Fuenlabrada regresaron al encuentro con prácticamente los mismos quintetos iniciales y la máxima intensidad. Golpeó primero el equipo local despegándose seis puntos, pero esa distancia fue de inmediato reducida a dos (50-48) con un sorprendente triple del valenciano (en las filas del Fuenlabrada) Salva Guardia, que no se prodiga demasiado desde esa distancia.

Quizá movió menos el banquillo Fuenlabrada, con lo que sus jugadores acusaron más el esfuerzo físico que los de Pamesa, aunque esta circunstancia no fue aprovechada por los de Katsikaris para romper el encuentro a su favor.

Lejos de conseguirlo, se vieron casi siempre abocados a jugar a remolque en el marcador, y gran parte de culpa la tuvo el pívot visitante Wideman, que regresó a la cancha para sacar petróleo de la carga de faltas personales que tenía Pamesa y poner de nuevo a su equipo por delante (54-58).

Además del norteamericano (autor de 23 puntos hoy), también se sumó a la fiesta el escolta croata Marko Tomas, esencial para mantener la ventaja de los suyos en el tramo final del tercer cuarto. A medida que Fuenlabrada iba tomando confianza en sus posibilidades de victoria, Pamesa se iba hundiendo hasta casi perder el aliento.

Claro ejemplo de ello fue la falta técnica con la que los árbitros sancionaron al técnico de Pamesa Fotis Katiskaris en el inicio del último periodo, una acción que permitió a Fuenlabrada ampliar su ventaja hasta los seis puntos (57-66) gracias a un nuevo lanzamiento de tres de Salva Guardia, que cuajó un gran encuentro tanto en defensa como en ataque.

Justo cuando todo parecía perdido para Pamesa el equipo empezó a funcionar en todas sus líneas. La constancia defensiva y la rapidez en el juego ofensivo permitieron a Pamesa igualar (66-66) con un parcial de 9-0.

Los minutos siguientes fueron de infarto, con constantes acciones de mérito por parte de ambos equipos -triples de Hernández y Douglas (que anotó 22 puntos)-, pero con un parcial de 23-5 en los últimos siete minutos y medio, el equipo de Kastikaris dejó literalmente "clavado" a su rival.