Paso de gigante de Cleveland y Utah hacia segunda ronda

nba | playoffs

Paso de gigante de Cleveland y Utah hacia segunda ronda

Paso de gigante de Cleveland y Utah hacia segunda ronda

Reuters

Cleveland y Utah ya tienen el 2-0 en las series que les enfrentan a Washington y Houston y están cerca de la segunda ronda, sobre todo los Jazz, que han logrado los dos triunfos en pista de los Rockets. Cleveland está un poco más cerca de dejar por tercer año consecutivo a los Wizards fuera de los playoffs. La táctica de Eddie Jordan de convertir la serie en una batalla física para mermar a LeBron James no funcionó y, tras un partido sin ninguna historia en la segunda parte, los Cavs quedan con un 2-0 tras los dos partidos disputados en el Quicken Loans Arena.

El complejo de Washington con los Cavaliers sigue creciendo. En 2006 cayeron en 4-2 en una serie increíble con partidos deslumbrantes en los que los Wizards tuvieron muchas opciones. En 2007, sin Butler ni Arenas, fueron una pieza fácil para un LeBron que afinaba la maquinaria para el recital que dio posteriormente ante Detroit. En 2008, por el momento, la serie viajará al Verizon Center de Washington con 2-0 para los de Ohio. Igual que hace un año, en vísperas de la barrida (4-0).

Washington todavía no ha perdido nada, pero deberá cambiar de cara en su pista. Porque en el primer partido plantó mucha batalla, en el sentido más literal del término, pero el segundo fue un paseo para los locales durante todo el segundo tiempo. Al final, paliza (116-86) y los pilares de los Wizards viendo el desenlace del partido en el banquillo y con absoluta cara de circunstancias.

Eddie Jordan, dominado por la experiencia de las últimas temporadas y por el pánico incontrolable hacia LeBron, ha intentado convertir la serie en una batalla física que limite el despliegue imparable de King James. Un estilo algo contra natura para los finos Wizards y mucho más apto para unos Cavaliers que, tras verse sorprendidos y desquiciados por su rival en el primer partido, subieron en el segundo las revoluciones defensivas, encontraron la forma de atacar y desarbolaron por completo a Washington hasta poner la diferencia final en 30 puntos y la serie, en 2-0.

LeBron se quedó a un rebote del triple-doble (30 puntos, 9 rebotes, 12 asistencias) y capitalizó completamente el juego una vez más. De la obsesión por frenarle de su rival surgieron las opciones de tiro exterior y los espacios en la zona durante el primer tiempo, aprovechados por un Ilgauskas decisivo (16 puntos, 9 rebotes y casi toda la segunda parte descansando) a la hora de frenar la buena salida de los Wizards que mandaron durante casi todo el primer cuarto y mantuvieron el partido igualado hasta bien entrado el segundo. Una vez que Cleveland se despegó, desapareció su agresividad defensiva hasta encajar 63 puntos en el segundo tiempo. Jamison empezó bien (9 puntos, 9 rebotes) hasta que entró en una espiral de fallos, contagiado por el también mal partido de Butler y la desastrosa aparición de Arenas, que cometió una técnica nada más saltar a pista y, en los casi 24 minutos que jugó firmó una serie de tiro de 2/10 para quedarse en 7 puntos. Haywood, que estaba trabajando a destajo en la zona, se fue expulsado tras una falta a LeBron. Era el ecuador del tercer cuarto y su equipo ya había bajado definitivamente los brazos.

Utah vuelve a ganar en Houston y acaricia la segunda ronda

Si Cleveland ha dado un paso importante hacia segunda ronda, Utah ha dejado su pase prácticamente certificado, ya que ha vuelto a ganar a Houston (84-90) y también domina 2-0 su serie, con el añadido de que los dos partidos se han disputado en el Toyota Center de Houston y que ahora la serie viaja a Utah, donde los de Jerry Sloan tienen una fiabilidad absoluta como locales (37-4 en la temporada regular).

Houston vendió muy cara su piel, consciente de que una derrota le dejaba con sus opciones bajo mínimos. Pero, sin Ming y también sin Alston, los Rockets andan muy justos de artillería para hacer frente a un equipo tan conjuntado y con tanto potencial como los Jazz. McGrady trabajó para no ver acercarse una nueva escala de su maldición de playoffs (nunca ha superado la primera ronda), y rozó el triple-doble (23 puntos, 13 rebotes, 9 asistencias). Bobby Jackson sí le acompañó esta vez (18 puntos), pero estuvieron demasiado solos y faltos de acierto en los minutos calientes del último cuarto, en el que T-Mac se quedó en 1 punto. Scola, como siempre, aportó trabajo (14 puntos, 5 rebotes hasta que fue eliminado por faltas).

Utah, por su parte, salió airoso sin ofrecer su mejor nivel. Empezó mandando (11-15) apoyado en Deron Williams, que anotó los tres primeros triple que lanzó y terminó con 22 puntos y 5 asistencias; Después, poco a poco, fue encontrando al resto de sus jugadores importantes. Okur, que comenzó mal, terminó con 16 puntos y 16 rebotes. Boozer (13 puntos, 7 rebotes) estuvo activo en el tramo final, al igual que Korver, que anotó cuatro puntos determinantes en el último minuto para que Utah, con 2-0 y la serie camino de su pista, vea a un paso una segunda ronda donde se encontraría con el vencedor del duelo entre Lakers y Nuggets.