Bajo el slogan Tiempo de magia se presentó ayer la nueva temporada de la ACB repitiendo fórmula, jugadores de la Liga española convertidos en auténticos superhéroes: Juan Carlos Navarro, con sus temidas bombas, el brazo biónico de Tiago Splitter, los tatuajes mágicos de Marcus Haislip, el puño de fuego de Felipe Reyes, Sitapha Savané y su sonrisa deslumbrante, Víctor Claver al más puro estilo de Batman o Ricky Rubio y "su carrera sin fin".
Una pena que tres de estos superhéroes lleguen tocados al inicio de la Liga. Juan Carlos Navarro, el único que no estuvo en la presentación, y Ricky Rubio se pierden el derbi. "Un partido contra el Barcelona es siempre especial, pero tengo que mirar más a largo plazo y no forzar. Yo no estaré, pero Juan Carlos tampoco. Eso equilibra un poco el derbi", apuntó el benjamín del grupo, que hizo pellas para estar en un acto donde confesó "echar de menos" a Rudy.
Vigente campeón.
El otro es Tiago Splitter, uno de los pilares del Tau Vitoria, vigente campeón. Aunque el pívot brasileño no está "al cien por cien" espera poder viajar a Menorca. "Defender el título es siempre difícil, y más teniendo en cuenta lo bien que se han reforzado todos los equipos. Espero que Dusko nos haga mejores de lo que somos".
Con tres refuerzos y un regreso, el de Marko Tomas, se presenta un Real Madrid que no quiere cometer los errores del año pasado. El primero de ellos el sábado (20:00, La2) en el Martín Carpena, escenario en el que dijeron adiós a la competición el curso pasado en playoffs. "Tenemos mejor equipo, pero lo nuevos necesitan un tiempo de acoplamiento. Esta pretemporada se nos ha hecho un poco cuesta arriba, pero conseguiremos que el equipo funcione", señaló Reyes. Que se preparen, porque Haislip promete "más y mejores" mates (la temporada pasada promedió uno por partido) y con el Unicaja como único equipo invicto de la pretemporada sólo piensa en "títulos".
También lo hacen los que quieren volver a estar arriba, como Víctor Claver: "Cada año se hace un buen equipo, pero en el momento de la verdad fallamos. Este año toca". O Sitapha Savané, un enamorado de España, que espera poder devolver a su Gran Canaria querido a los playoffs de la ACB.
