Más perdido que un belga en una plaza de toros. La frase no se ajusta al estreno de Tomas van den Spiegel en el coso de Vistalegre. Quizá sea porque es flamenco -de Gante- o, más bien, porque es un buen jugador, acostumbrado a plazas grandes. Comentaba Llull que su nuevo compañero estaba algo nervioso antes del debut. No tiene costumbre de jugar por las mañanas. Sin embargo, salió en el minuto siete por las bajas y al acabar el primer cuarto ya llevaba dos rebotes y cuatro puntos: una canasta al poste y un alley-oop. Transmitió buenas sensaciones. Primero, porque es muy alto, con brazos largos. Sus 214 centímetros son de verdad, no como los 211 de Asselin. Pero lo principal es que es una torre móvil, que participa del juego sin condicionarlo, como hacía Lazaros. Sin balones, el griego se diluyó hasta desaparecer. Van den Spiegel se adapta bastante más al estilo de Plaza. Le gana la espalda a su defensor cuando éste sale a parar las penetraciones o a ayudar en el marcaje a Reyes.

El capitán, por cierto, excelente una jornada más, aunque esta vez funcionó el bloque. Y sin meter un triple. Bueno, uno sí, el de Hosley al final: 1/18. El americano aprovechó los espacios (el Madrid corrió y jugó varios minutos con cuatro exteriores) para destrozar el aro manresano. Magnífica actitud defensiva y buen ataque colectivo, pese a los triples.

Sergio Llull: "Es un gran jugador"

"Van den Spiegel es un gran jugador que viene a trabajar para el equipo. Ante el Ricoh Manresa defendimos bien y jugamos en ataque con cabeza. Ahora tenemos que ganar los dos partidos que nos quedan antes de acabar la primera vuelta".

Joan Plaza: "No es nada egoísta"

"Van den Spiegel transmite buenas sensaciones. No es nada egoísta en su juego y ha salvado el debut con buena nota. Estuvimos muy poco acertados en los triples, aunque a gran nivel en defensa, lo que nos permitió salir al contraataque".