El MMT Estudiantes echa a Ricky de la fiesta

Baloncesto | Copa del Rey | MMT Estudiantes 80 - DKV Joventud 75

El MMT Estudiantes echa a Ricky de la fiesta

El MMT Estudiantes echa a Ricky de la fiesta

felipe sevillano

Un gran Udrih lideró a los colegiales ante el vigente campeón

Estudiantes era el invitado a la fiesta, pero quería ser el Peter Sellers de El Guateque en lugar de quedarse hundido en el sillón y ver cómo se agotaba el hielo sin decir esta boca es mía. Así que se dejó notar y tumbó a quien llegaba a Madrid como vigente campeón, el DKV Joventut, que fue presa de esa maldición que desde 1988 dice que no hay equipo que repite título. Sucumbió al exorcismo.

Pocas veces se siente tan cómodo el Estu como cuando nadie da un duro por él. Ha sido siempre así, ley natural del Ramiro. Confabulados, los de Luis Casimiro demostraron desde el futbolístico 1-1 inicial que la Penya tendría que poner a plena producción su factoría. La primera emboscada del MMT Estudiantes tuvo a Ricky Rubio de rehén. La perla no se encontraba a gusto en un quinteto en el que Karl sorprendía al salir de inicio. Udrih acertaba desde fuera y el Estu hacía daño dentro. Primer efecto: triple cambio en el Joventut -para algo Sito Alonso es sucesor de Aíto- con Ricky y su -1 de valoración a la cabeza. Junto a él, Karl y Sonseca también encontraban respiro en el banquillo.

Jasen.

La entrada de Mallet, Ribas y Moiso tuvo efecto inmediato pese a la zona de Casimiro. Tras el 17-15 del primer cuarto, el capi colegial, Jasen, acudió en auxilio y con cuatro puntos seguidos dio oxígeno al Estu (23-17). Pero en un visto y no visto, la luz se apagó y un parcial de 0-10 lanzó al Joventut y convirtió en inofensivas las tres personales de Rubio. La presión aupó al Estu y el descanso dibujó un empate que hacía justicia: 34-34. Imagino que los ojeadores NBA se miraron unos a otros; apenas tenían nada que marcar en rojo en sus agendas, Ricky no estaba maduro como para zarandear el árbol y que así la manzana caiga. Se equivocaban.Ricky dejó lo mejor de sí para la reanudación, donde cinco puntos seguidos suyos (un 2+1 y un slalom con bandejita) pusieron al Estu a punto de caramelo: 47-46. Pero los colegiales apretaron los dientes, Udrih recuperó el tiro y Popovic metió en más de un problema a Moiso y compañía. Y, como picante extra, Jasen puso un tapón a Rubio y acto seguido le miró fijamente como queriendo decir: "Chaval, por aquí no...". Faltaba por ver cómo encajaba esa afrenta. Pues bien: resopló, el flequillo le dejó ver que eso era una Copa y el talento habló por él. Parcial de 0-7, pero sin sentencia, porque Brewer y Udrih lideraron el arreón madrileño. El Joventut era eliminado y el Estu daba el sorpresón. Hay veces en que no hace falta vestirse de blanco, atascar un WC o liarla con un elefante para dar que hablar en una fiesta...