Le vemos muy concentrado. ¿Sólo tiene ojos para el Barça?

Pues, ahora mismo, es cierto que sólo tengo en mente al Barcelona. Partidos tan intensos y físicos como ése son los que me motivan.

Es decir, que no descarta romperse otra vez la nariz (en diciembre, en su última visita al Palau Blaugrana, se la fracturó y fue baja un mes).

¡Uff, no eso no, no tiene que llegar a tanto! Pero seguro que va a ser un partido tremendamente competido.

¿Qué Real Madrid veremos, el de Tel Aviv o el de Bilbao?

Espero que el de Israel, donde realizamos un juego muy completo. Lo que no podemos hacer es repetir el error cometido ante el Iurbentia.

¿Que fue...?

No haber jugado con intensidad en defensa. No nos aplicamos como debíamos y así nos fue.

Al equipo le costó arrancar esta temporada. Usted vivió un despertar igualmente lento. ¿Se siente a gusto?

En mejor forma que en octubre o noviembre. El trabajo ha dado sus frutos colectiva e individualmente.

En diciembre de 2004 vivió su primer Barça-Madrid. Por cierto, ¿sabe quién fue el máximo anotador blanco? Bullock.

El tiempo pasa, pero Louis sigue con la calidad intacta. Sus duelos con Navarro son extraordinarios, el pulso entre los dos mejores escoltas de Europa. Él y Navarro juegan un partido dentro de otro partido.

La victoria en el Palau daría el primer puesto y la ventaja de cancha en cuartos. ¿Presiona?

Motiva, más bien. Queremos ganar, seguir invictos en el Top 16 y lanzar un mensaje a Europa de que el Real Madrid está ahí, que aspira a todo. Pero para eso, frente al Barcelona tenemos que hacer nuestro partido más completo.

Hemos citado a Navarro, pero ¿le preocupa algún otro jugador?

Ninguno en particular. Navarro es el líder del Barça, pero en el juego interior, por ejemplo, tienen mucho físico y calidad. Ellos se pueden permitir gastar energías porque cuentan con una gran rotación.

El Madrid levanta cabeza, pero ha soportado muchas críticas esta temporada. ¿Han dolido?

Nunca leo los periódicos de aquí, sí los de mi país. Eso sí, cuando estaba allí no los leía... Soy consciente de que ha habido malestar, porque es cierto que nos ha costado coger el ritmo, pero ahora soy optimista.

¿A qué sabe un Real Madrid-Barcelona?

A victoria. Es el gran duelo para el madridismo.

Y usted ya es de aquí...

Soy el belga de Chamberí y el Barça motiva mucho. Sé que el aficionado espera con especial ilusión el clásico.