Los de Jaume Ponsarnau lucharon hasta el final, en un partido que se les puso cuesta arriba y en el que los blancos llegaron a dominar por catorce puntos (54-68, min. 31). En el último cuarto, el Ricoh echó el resto, con un Guille Rubio espléndido (30 puntos y 35 de valoración). Llegó a ponerse a tan solo dos puntos (69-71, min. 37), pero el acierto del ex jugador del Manresa Sergi Llull impidió que los locales hicieran el más difícil todavía.
Los primeros minutos del partido estuvieron marcados por la igualdad y la intensidad. Los primeros compases fueron atractivos para el espectador. Por parte del Ricoh Manresa, el mérito fue para Rubio, que, a excepción de tres puntos de Asselin, en una espectacular jugada de 2+1 con ''alley-hoop'' incluido, consiguió ocho de los primeros once de los catalanes (11-8, min 4). En el marcador, el Manresa empezó dominando, pero no duró mucho. Cinco puntos consecutivos de Kennedy Winston adelantaban al Madrid por primera vez desde el 2-3 del inicio. Seis puntos más de los blancos, obra de Raúl López, Hervelle y Bullock, ponían el Madrid siete arriba (16-23, min. 9).
Ponsanau pidió tiempo muerto e hizo un triple cambio en su equipo, para dar entrada a Ibaka, Bulfoni y San Miguel. Pero el Real Madrid no tuvo problemas para mantener la diferencia (18-25, min. 10). Los triples de Tomas permitían al Madrid continuar mandando sin especial dificultad y cuando otro triple, en este caso de Hervelle, aumentaba la diferencia aún más (29-40, min. 26), el Manresa reaccionó. Fue gracias a dos triples consecutivos de San Miguel y Bulfoni, que más una canasta de un impecable Rubio, pusieron a los catalanes a sólo un punto (39-40, min. 28). El Manresa estaba ahí, aunque un eficiente Felipe Reyes consiguió que su equipo se fuera al descanso con cinco de ventaja (39-44, min. 20).
El tercer cuarto empezó de manera espectacular para el Manresa, con un mate de Asselin y un triple de Bulfoni, que empataba por primera vez el partido (44-44, min 21). Pero el Madrid no se achicó y continuó haciendo su juego. Dos triples consecutivos de Tomas y Bullock ponían la distancia en el marcador en siete puntos (48-55, min. 26). El Manresa aumentó la agresividad en defensa, pero eso no fue suficiente para dar la vuelta al partido. Bullock, en su estilo, puso la guinda al cuarto con un triple (54-66, min. 30).
Nada más iniciar el primer cuarto, el Madrid consiguió la máxima ventaja del partido (54-68, min. 31). Era la última oportunidad para un Manresa que aún soñaba. Los catalanes remontaron, pero no lo suficiente. Un parcial de 15-4, que culminó con cinco puntos consecutivos de Jordi Grimau (69-71, min. 37), puso al Manresa a tan solo dos puntos. Pero el acierto de Llull, que consiguió siete de los últimos nueve puntos de su equipo, dio por finiquitada la ilusión manresana. Última canasta para el mejor del partido, Guille Rubio, que con un triple dejó el marcador final en 81-84.
