Celebración en Los Ángeles y frustración en Orlando

nba | reacciones

Celebración en Los Ángeles y frustración en Orlando

Celebración en Los Ángeles y frustración en Orlando

Reuters

El alero turco Hedo Turkoglu se ha acogido a la opción de convertirse en agente libre y ha preferido buscar otras opciones dentro de la NBA. Si los Magic quieren volverlo a contratar tendrán que pagarle más de los 7,3 millones de dólares que iba a cobrar el próximo año.

El paso de las horas desde que Los Ángeles Lakers se proclamaron campeones de la NBA tras ganar la serie final por 4-1 a los Magic de Orlando ha dejado las primeras reacciones con la celebración "violenta" en la ciudad californiana y las de "frustración" en la de Florida.

Mientras los directivos de los Magic tratan de argumentar que el hecho de haber llegado a la Final por segunda vez en la historia del equipo fue todo un éxito, los aficionados y jugadores sienten que cayeron ante los Lakers de una forma que dejó la sensación de que les habían "facilitado" el triunfo al rival.

La primera reacción de disconformidad que se ha dado dentro de la plantilla a la derrota ante los Lakers la protagonizó el alero turco Hedo Turkoglu, quien pese a que le queda un año de contrato, se ha acogido a la opción de convertirse en agente libre.

Turkoglu, que el próximo año iba a cobrar 7,3 millones de dólares, ha preferido buscar otras opciones dentro de la NBA y si los Magic quieren volverlo a contratar tendrán que pagarle más dinero.

"Tiene todo el sentido del mundo el que haya dado por terminado su contrato", declaró el agente de Turkoglu, Lon Babby. "Si ha habido un jugador productivo y consistente en la fase final del campeonato con los Magic ese ha sido Hedo".

Turkoglu, de 30 años, que durante la temporada regular consiguió promedios de 16,8 puntos; 5,3 rebotes y 4,9 asistencias, siente que su futuro no debe estar ligado a los Magic si en el mercado de los agentes libres recibe una oferta mejor.

Babby dijo que la derrota en la Final podía haber influido en la decisión de su cliente, porque fue uno de los que más sintió la manera de cómo perdieron la serie, con dos "regalos" con las derrotas que sufrieron en el segundo y cuarto partido.

También ha levantado polémica la forma que tuvieron los Magic de dejarse hacer una racha de 16-0 en el segundo cuarto del quinto partido, sin que desde el banquillo el entrenador Stan Van Gundy se hiciese nada por recuperar el control y la concentración que el equipo había tenido hasta entonces.

Cada vez son más las interrogantes que surgen en cuanto a las decisiones que tomó Van Gundy durante la serie, especialmente en la de no utilizar al veterano base Anthony Johnson, que fue clave en la temporada regular cuando se lesionó Jameer Nelson.

Los comentaristas de los distintos medios de comunicación de Orlando se siguen preguntando por qué Van Gundy no sacó a Johnson, un jugador con experiencia y de gran control del balón, cuando Rafer Alston y Nelson no respondían en la dirección del juego del equipo.

Tampoco entienden la falta de energía y convencimiento de triunfo que el pívot estrella del equipo, Dwight Howard, mostró durante todo el quinto partido, sin que le hiciese reaccionar.

"Es cierto que no fui el mismo de los partidos anteriores, pero tampoco tengo una respuesta para explicar que sucedió", comentó Howard después de haber visto la celebración de los jugadores de los Lakers, en el Amway Arena, tras conseguir el decimoquinto título de su historia.

Al final el sentir que hay entre los aficionados de los Magic es una gran interrogante sobre si realmente los Lakers fueron superiores a su equipo o supieron aprovechar mejor las concesiones que le hizo el rival. Este sentimiento y duda es la que también manifestaron los jugadores de los Magic al concluir el quinto partido y ver como se quedaban de nuevo sin el título de liga en las segundas Finales de la NBA que disputaban.

"Esta claro que no será nada fácil asimilar esta derrota, por mucho que digamos que nadie esperaba que estuviésemos en la Final, especialmente porque en los partidos decisivos fuimos siempre mejores que los Lakers y perdimos", destacó Turkoglu. "Sólo en el primer partido los Lakers ganaron bien y fueron superiores".

Alston fue el que mejor definió lo que había sucedido dentro del equipo cuando dijo que "nos olvidamos de hacer bien las cosas en los momentos decisivos y eso no fue culpa de los aciertos de los Lakers, sino de nuestros propios errores".