Real Madrid y Fuenlabrada, que ha perdido su patrocinio de Alta Gestión, evidenciaron desde el primer minuto que son equipos en pruebas y que todavía no han alcanzado sus respectivas velocidades de crucero. De hecho, aunque el Madrid se adelantó en el marcador (0-4 en el primer minuto), el Fuenlabrada fue el que dominó el periodo gracias a su mayor compenetración, ya que los blancos apenas llevan nueve días juntos, después de que sus jugadores internacionales que participaron en el Europeo (Reyes, Garbajosa, Llull, Lavrinovic y Velickovic) regresaran.

El Real Madrid, además, cuenta con las bajas de Lavrinovic y Van den Spiegel, y otra novedad más Cheik T. Samb. La defensa fuenlabreña fue la que marcó la diferencia en los primeros minutos, lo que unido a la falta de acierto de los jugadores de Ettore Mesina, dio como resultado que al final del primer cuarto el resultado fuera de 24-18.

La cosa cambió cuando el Real Madrid salió dispuesto a igualar a su rival en esa faceta y consiguió un parcial de 3-10 en los primeros cinco minutos, que restableció la igualdad en el marcador que se mantuvo hasta el descanso, 36 iguales. Bullock demostró que su puntería sigue afinada; Reyes, que será fundamental, como siempre en este equipo; Llull, que va a ser uno de los focos de las broncas de Messina y el resto apuntaron buenas maneras, pero todos muy lejos de lo que pueden llegar a ser.

El Fuenlabrada, pese al cambio casi total de nombres ha armado un equipo muy parecido al del año pasado, con Fich como eficiente artillero, Mainoldi como hombre fuerte en cancha y Berzins como responsable de debajo de los aros. Un equipo al que habrá que ver su capacidad de desarrollo pero con buena pinta.

En la continuación, siguieron los fallos, las imprecisiones y las faltas de cohesión y compenetración. Pero se mantuvo la igualdad, con 41-42 en los primeros cinco minutos tras un 5-6 paupérrimo de parcial. Ante la ausencia de juego en equipo surgieron las individualidades y al término del tercer cuarto el marcador reflejó un 45-51.

La ''pájara'' anotadora del equipo capitalino en los tres primeros minutos del último periodo, dio alas al Fuenlabrada, que a falta de tres minutos y medio para el final volvió a dominar el marcador, 58-56. Messina siguió haciendo cambios y pruebas, aunque a tres minutos para el final decidió que fueran los pesos pesados los que decidieran el partido, es decir, Garbajosa, Reyes, Prigioni, Kaukenas y Bullock.

Aunque la derrota hubiera sido un daño colateral asumible en el primer partido, los teóricos titulares del Real Madrid decidieron finalmente la victoria.