Un parcial de 24-5 en los últimos ocho minutos del segundo cuarto (del 22-21 al 46-26, min. 20) le bastó al Regal Barcelona para sentenciar su trámite ante el Zalgiris Kaunas lituano, colista del grupo y que se jugaba en el Palau Blaugrana su última opción de estar en la siguiente ronda continental.

El feudo azulgrana no era precisamente el lugar más propicio para los hombres de Gintaras Krapikas para lograr un resultado positivo. Llegaban a Barcelona tras sumar seis derrotas consecutivas en la Euroliga y ante un rival que sigue siendo el único equipo invicto en la competición.

Antes del inicio del choque, el alero barcelonista Pete Mickeal recibió el trofeo de MVP del mes de noviembre de manos de Jordi Bertomeu, director general de la Euroliga. El norteamericano, posteriormente, se uniría a la fiesta en el Palau siendo el máximo anotador local (14 puntos).

Si bien el Zalgiris resistió apenas doce minutos, uno de sus hombres plantó cara a los azulgrana. Fue el pívot Travis Watson quien, con 17 puntos y 14 rebotes, logró más valoración que todo su equipo.

Eso no evitó que el Barça llegase a un máxima ventaja de 40 puntos (85-45, min. 37). Afortunadamente, Xavi Pascual rotó constantemente a sus hombres y dio tregua al rival.