La derrota ante el Granada enciende las alarmas del Fuenlabrada

ACB | FUENLABRADA 76 - GRANADA 83

La derrota ante el Granada enciende las alarmas del Fuenlabrada

El Club Baloncesto Granada se apuntó a la cada vez más extendida costumbre de ganar en Fuenlabrada y se convirtió esta tarde en el sexto visitante de ocho que profana el otrora complicado feudo del equipo madrileño que, además, cae (76-83) ante otro de los adversarios directos en la lucha por la permanencia.

El equipo granadino casi calcó el partido que hace una semana le dio el triunfo al Suzuki Manresa ante el mismo rival y en el mismo escenario: Aguantó el inicial empuje local, se mantuvo a una distancia adecuada durante todo el partido y ajustició a un Fuenlabrada que padece del mal del exceso de responsabilidad en los momentos que deciden los partidos.

Esta vez no fue una defensa intensa y de manual y un precario rebote defensivo los que tumbaron a los hoy locales, en esta ocasión los laureles hay que otorgárselos al alimón al acierto ofensivo del escolta estadounidense Jimmie Hunter, al alero australiano con pasaporte inglés Jose Ingles y al base italo-argentino Nicolas Gianella.

El primero sostuvo a su equipo en la primera mitad del partido; el segundo, el mejor jugador del partido de largo, hasta los últimos cinco minutos; Gianella disparó el tiro de gracia con nueve de los últimos doce puntos de su equipo.

El Fuenlabrada tiene muy mal pronóstico. Los números dicen que sólo ha ganado un partido de los últimos diez, pero un análisis más profundo da como resultado un equipo sin liderazgo, unas pretendidas estrellas encumbradas antes de tiempo y un proverbial victimismo focalizado en los árbitros.

El desarrollo del partido no tiene demasiada sustancia. Después de una salida en tromba del equipo de Chus Mateo (8-0. minuto 2), los citados Hunter e Ingles igualaron el partido hasta el minuto 33 (63-63). Lo demás, el aplomo de los dirigidos por Trifón Poch y los desnortados intentos del Ayuda en Acción, ya es historia; como historia son los días de vino y rosas del Fuenlabrada cuando ocupaba páginas de diarios y era entronizado como equipo revelación. Ahora la realidad es otra y más que preocupante.