Apenas diez minutos tardó Estados Unidos en saberse ganador del primer partido que disputó en el Mundial ante Croacia, al despegarse definitivamente para llegar al final con casi treinta puntos de diferencia, 106-78.

Tras un primer cuarto igualado y que acabó con un 22-20 para los norteamericanos, el parcial de 26-6 de los segundos diez minutos dinamitó el partido por completo.

Los estadounidenses decidieron apretar las tuercas en defensa y lanzarse en tromba al ataque con todo su potencial. El resultado fue que Croacia quedó maniatada y sin apenas opciones con el balón, mientras que Mike Krzyzewski, el entrenador de los USA, pudo comenzar a mover el banquillo y a dar minutos a todos sus jugadores.

A partir del descanso, 48-26, el partido entró en una dinámica completamente diferente. Estados Unidos mantuvo su estructura y juego de individualidades, mientras que Croacia, ya perdedora, se soltó un poco y pudo mantener la diferencia en el marcador oscilando entre los veinte y los treinta puntos, hasta los 28 finales.

Durant y Gordon fueron los mejores anotadores, aunque el reparto de puntos fue bastante equitativo, mientras que por parte croata Popovic, Bogdanovic y el madridista Ante Tomic fueron los más destacados.