Tenían que coincidir varios resultados y se dieron... todos. Brasil cerró su participación en la liguilla con una auténtica exhibición ante una Croacia que se limitó a aplaudir y posibilitó que ya en octavos se vayan a vivir dos cruces de alta tensión: Brasil-Argentina y Croacia-Serbia.

Por lo visto ayer, Croacia es la que más se debe preocupar. Los brasileños dieron un auténtico recital con Machado como líder (4/5 en triples) y Splitter sin desgastarse (sólo 16 minutos en cancha). Ya tras el descanso, con un parcial de 9-0, ponían tierra de por medio (57-32). Croacia no se acercaría más gracias a que Varejao reinaba en el rebote (12) y Barbosa sí acertaba (17 puntos).

Ahora todas las buenas sensaciones deberán confirmarlas ante la Argentina de Scola. Croacia, por su parte, mucho debe mejorar para hacerle sombra a su vecina Serbia. Pero es lo bueno de estos choques de intensa rivalidad, que todo es posible.