Este es un título de la era Barack Obama

Mundial 2010 | El cuaderno de Daimel

Este es un título de la era Barack Obama

Este es un título de la era Barack Obama

La NBA triunfa jugando serio. Estados Unidos ha vuelto a ser campeón del mundo dieciséis años después dejándole a los rivales una sensación inequívoca de haberse llevado el título con un equipo vulnerable. Eso sí, un equipo C del baloncesto norteamericano comprometido y poco pretencioso. Un grupo de manos unidas. Esta selección estadounidense se le ha escapado viva a los mejores equipos del mundo FIBA por defecto más que por exceso. Y una paradoja: el libro sagrado que siempre le concede la pureza, la ortodoxia y la ciencia del baloncesto a Europa se ha traspapelado. EE UU ha ganado minimizando errores, con una estética antigua radicada en pocos centímetros, una gran estrella alrededor de la cual gira todo su juego, un comportamiento modesto y coral y un talante de educación y respeto. Este es un título de la era Obama, sin duda.

Agua para el mal sabor. El que no se pudiera ver en directo por televisión el último partido de España en el Mundial (imagínenlo en fútbol) además de un bochorno puede ser un símbolo del ridículo poso que queda. La ACB recogida en esa buena oferta de ocio local de poca trascendencia general. Deficitaria al máximo según expresó Florentino Pérez en la asamblea. La Euroliga, complicada de ver y seguir. Y la NBA, la de todos los informativos televisivos, la del Pau Gasol triunfador, la que en menos de un mes calentará nuestros motores con un deseado Barcelona­-Los Angeles Lakers. España cumplió y perdió el trámite contra Argentina con detalles gratuitos de juego pero dejando una estela creciente de inercia negativa en su entorno y en el juicio de su bagaje, quién sabe si buscada o inevitable. Parece que los juicios se han agriado con el frío, desde el día después de la derrota contra Serbia hasta hoy. Los más comprensivos y generosos de repente parecen dispuestos a hacerle un único hueco a Sergio Scariolo en el banquillo de los acusados. Habrá que esperar juicios y acontecimientos pero la opinión de los jugadores volverá a ser determinante en los ajustes futuros de esta selección. Como siempre ha sido. Probablemente como tiene que ser.

Jugadores y recuerdos. Punto final de un Mundial que ha dejado detalles agradables, algunos inesperados. Más allá de las actuaciones destacadas de jugadores contrastados como Durant, Scola, Kleiza, Navarro, Turkoglu o Ilyasova hay otros grandes beneficiados de estas dos semanas de baloncesto de alto nivel en Turquía. Uno de ellos una estrella global como el chino Yi Jianlian, dueño de un 20-10 en media de puntos y rebotes que parece ciencia ficción en el baloncesto FIBA actual. Pero concedo menciones especiales a los jóvenes rusos Mozgov y Khvostov, a la graduación de altos vuelos del brasileño Marcelinho Huertas, a los aleros neozelandeses Penney y Abercrombie, a la recuperación de Gelabale, a la buena pinta del serbio Keselj y a los veteranos cotonous Joaquim Gomes y Lamizana.