Subastado el manuscrito que "fundó" el baloncesto

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Subastado el manuscrito que "fundó" el baloncesto

Subastado el manuscrito que "fundó" el baloncesto

El texto recoge las trece primeras reglas del deporte del baloncesto ("basket ball") creadas por James Naismith hace 120 años. La casas Sotheby's lo ha vendido por 4'3 millones de dólares.

El manuscrito en el que un profesor de educación física estableció las trece reglas básicas de un nuevo juego al que bautizó como "basket ball" (baloncesto), se vendió hoy por 4,3 millones de dólares (unos 3,2 millones de euros) en la casa de subastas Sotheby's de Nueva York.

La venta de las dos hojas en las que ese profesor sentó las bases de este deporte sobrepasó con creces las expectativas de la casa de subastas, que había pronosticado que este lote alcanzara entre el millón y medio y los dos millones de dólares.

Las trece reglas que recoge el texto, escrito hace ya 120 años, suponen la "Carta Magna" de este deporte, uno de los más populares de todo el mundo y de los que más dinero mueven hoy en día. Su creador fue James Naismith, el profesor de educación física de un gimnasio de la Asociación Cristina de Jóvenes (YMCA) en la localidad estadounidense de Springfield (Massachusetts) que en diciembre de 1891 decidió crear un nuevo juego para entrenar a sus estudiantes durante los meses de invierno.

El juego tuvo un éxito inmediato y rápidamente se extendió por todo el mundo, para llegar a China en 1895, incorporarse a los Juegos Olímpicos en 1936 y dar origen a la NBA en 1949, aunque de las dos hojas originales de sus reglas han pasado ahora a un reglamento oficial de ochenta páginas.

Los fondos obtenidos de la venta de este escrito único, que hasta ahora habían pertenecido a la familia de su autor, serán destinados a la Fundación Internacional de Baloncesto Naishith, que busca la promoción y reconocimiento del espíritu deportivo en este y otros deportes.

"Naismith y su familia han conservado uno de los grandes documentos en la historia del deporte y la cultura estadounidense: el original de dos páginas mecanografiadas de las normas que, como se señala en la parte inferior de la segunda hoja, se colgó en el gimnasio para que los muchachos aprendieran las reglas", explicó el especialista de Sotheby''s Selby Kiffer en un comunicado.

Añadió que "a partir de esta ''Carta Magna'', cientos de millones de jugadores y aficionados de todo el mundo han vivido incontables millones de horas de diversión, emoción y triunfo". "Estoy muy orgulloso de los logros de mi abuelo durante su vida, así como del legado de la deportividad y el trabajo en equipo que sobreviven hoy en día", apuntó al respecto su descendiente Ian Naismith en el mismo comunicado.

Su abuelo, que por entonces tenía 30 años y más tarde se convertiría en médico y ministro presbiteriano, ya era un cristiano convencido de que la condición física es una parte imprescindible del desarrollo espiritual, según Sotheby''s.

Los largos meses de invierno en los que no se podía ni jugar al fútbol americano ni al béisbol motivaron a Naismith para ingeniar un deporte de equipo que se pudiera practicar en interior. Para ello, tomó como referencia un juego que practicaba de niño, llamado "Duck on a Rock" y le añadió algunos elementos de fútbol, ''lacrosse'' y rugby, al tiempo que eliminó el contacto físico, para establecer así las trece reglas originales del "basket ball".

El nombre del juego conservó sus dos palabras hasta 1921, cuando se decidió su unión, y el primer partido, siempre según los datos de Sotheby''s, se jugó con una pelota de fútbol y canastas de melocotones. Naismith, que murió en 1940, vivió para ver su invento adoptado como un deporte olímpico en 1936, y dejó al mundo "toda una vida de enseñanza de deportividad, desinterés e igualdad, principios que siguen siendo válidos hoy en día", según afirmó al respecto la asesora del Departamento de Colecciones de Sotheby''s Leila Dunbar.

En el ámbito estrictamente deportivo, se considera que la mayor aportación de este nuevo juego fue el bote de la pelota, que, en palabras del propio Naismith, es "una de las maniobras más espectaculares y emocionantes en el baloncesto". Curiosamente, el bote fue descubierto de forma natural y desarrollado por los primeros jugadores como una forma de avanzar con el balón sin violar la norma original de Naismith de que un jugador no puede correr con él en las manos.