El Unicaja, ya clasificado para la siguiente fase, perdió por primera vez como local en la Euroliga ante el Brose Basket en un partido intrascendente en el que únicamente había en juego el acabar segundo o tercero, aunque el triunfo del Real Madrid le relega a la tercera posición del grupo B.

El equipo malagueño tenía que volver a reencontrarse con el triunfo después de las últimas derrotas tanto en la Euroliga como en la ACB y devolver la ilusión a sus aficionados. Lo consiguió parcialmente con un buen trabajo defensivo, a pesar del inicio, que fue algo frío.

A medida que fueron pasando los minutos, el esfuerzo del pívot inglés Joel Freeland y los pocos errores cometidos en ataque hicieron que el Brose dejara de mandar en el marcador en el minuto 9. El Unicaja con un parcial de 13-0 había obtenido una notable diferencia, que fue aumentando 29-16, minuto 12, aunque el conjunto alemán nunca se rindió.

El Brose, con jugadores muy versátiles, ponían en dificultad a los integrantes del Unicaja, que tenían problemas para defender al base Anton Gavel, once puntos, y al pívot Tibor Pleiss, muy ágil para su estatura, aunque los cajistas, mejor técnicamente, mantenían su progresión (40-32) en el minuto 20.

La victoria no peligraba para el Unicaja, que se mantenía muy serio, ya que el Brose cuando se acercaba al marcador los andaluces volvían a su nivel de juego anterior con un sistema defensivo fuerte y sin fisuras.

El conjunto alemán buscaba la primera victoria como visitante, algo impensable como se estaba desarrollando el enfrentamiento, pero como suele ser habitual en el Unicaja, la relajación del último periodo la aprovechó el Brose con un parcial de 0-7 con una antideportiva del pívot escocés Robert Archibal, para ponerse por delante (58-61) en el minuto 36.

El técnico cajista Aíto García Reneses, intentó frenar a los alemanes con un tiempo y distintos cambios y lo consiguió porque dos triples de Blanco y Rubio, asentaron a su equipo (65-63) en el minuto 37.

El partido entró en la recta final igualado (68-68), pero los fallos en ataque del Unicaja por parte de McIntyre, el último error de Tripkovic en el pase y el acierto en los tiros libres de los visitantes sirvió para que el Brose consiguiera la primera victoria como visitante en la Euroliga.