Aquel viejo tópico de la Navidad blanca resulta esta vez descriptivo para nuestras ligas de fútbol y baloncesto. Prima el blanco, domina el Real Madrid, líder en los dos campeonatos. Aunque por tan poco en la ACB, que es casi una anécdota. La derrota por la tarde del Barça­ en Vitoria compensó el traspié madridista en el derbi de la pasada jornada. Antes, por la mañana, los de Laso habían hecho los deberes por si acaso. Ganaron por 22 al Assignia­ Manresa y compensaron de golpe los 21 puntos de ventaja que le llevaban­ los azulgrana en el basket­-­average general.

Premio en el adiós a la Caja Mágica. El Real se viste de líder antes del Clásico (4 de enero en el Palacio), aunque el jueves 29 despedirá el año en Badalona. Por detrás, Unicaja, Caja Laboral­ y Lucentum acechan a una victoria. Hay Liga, qué bonita, cuánta emoción junta si se disputara a la antigua usanza, sin playoffs.

La diferencia de recursos entre el Madrid y el Manresa es tan grande como la que reflejó el marcador, quizá mayor. "Empezamos expectantes y luego tuvimos miedo, es decir, pensamos -contó Ponsarnau- y mientras piensas ellos corren, rebotean...". A los 17 minutos la ventaja era ya de 22 (39-17), la misma que al final. Como faltó emoción, haremos recuento de detalles.

Laso volvió a alinear de salida a Singler y a Suárez ante la baja de Pocius. El americano entusiasmó en el primer cuarto, participativo y mejor en el rebote (4). Llevaba diez de valoración con dos canastas, dos asistencias y un tapón en siete minutos. Al descanso, hasta seis jugadores locales valoraban más que todo el Assignia junto (6).

Más pormenores: Ca­rroll no anotó hasta el minuto 29, pero incluso en un día malo se muestra excesivo en ataque. Abrió la cuenta con cinco puntos de golpe, una canasta y un triple, lo que puso en pie a la Caja Mágica, que volvería a aplaudir con fervor las manos rápidas de Jorge Sanz y el debut de Dani Díez. En el día de la cantera, el más brillante, claro, fue un sobradísimo Mirotic, con el permiso de Reyes, que en 13 minutos valoró 26. ¿Lo peor del Madrid? Sin duda, las 23 pérdidas. Nuevo líder­, a fin de cuentas.