Victoria trabajada del Barça ante un rival muy intenso

ACB | BARCELONA 74 - MANRESA 61

Victoria trabajada del Barça ante un rival muy intenso

Victoria trabajada del Barça ante un rival muy intenso

Rodolfo Molina

El Barcelona se reforzó en la parte alta de la clasificación con su undécima victoria, gracias a un triunfo muy trabajado (74-61) contra un Manresa que aportó tesón y espectacularidad al partido.

El Barcelona se reforzó en la parte alta de la clasificación con su undécima victoria, gracias a un triunfo muy trabajado (74-61) contra un Manresa que aportó tesón y espectacularidad al partido, tanto en tapones como en rebotes, aunque penalizó la pérdida de dieciocho balones. El Manresa saltó a la pista azulgrana sin ningún complejo, donde se encontró a un rival poco acertado y con muchas lagunas defensivas y poco tensionado. De hecho, hasta un minuto antes de finalizar los primeros diez minutos, al Barça sólo le había caído una personal.

Un triple de Huertas justo arrancado el primer cuarto dejó un 7-4, que poco después fue respondido con otro lanzamiento de larga distancia de Álex Hernándes para empatar el encuentro (9-9). El Manresa plantó cara y una acción para resumir este descaro contra el colíder fue un mate espectacular de Downs saltándose por los aires la intimidación de todo un Fran Vázquez que no pudo hacer nada (14-15). Una acción similar con los dos protagonistas volvió a suceder en el último cuarto.

El Barcelona empezó a ir por debajo del marcador hasta que fue al rescate el siempre eficiente Ingles, cuyos dos últimos puntos permitieron a su equipo empatar el encuentro (17-17) al final de la primera pausa. El estadounidense volvió a ser resolutivo para el Barcelona en el segundo cuarto, especialmente en un triple con el que el equipo local parecía despegarse (27-23) de un rival que pese a sus limitaciones estaba comprometiendo al vigente campeón de Liga.

Después de finalizar la primera parte con un enceste de Adam Hanga (32-28), para neutralizar la máxima diferencia azulgrana del partido hasta entonces(32-25), el encuentro se reanudó con un Barcelona fortalecido en defensa. El Assignia, que se había mantenido en pie durante dos cuartos, cayó en una dinámica en la que se sintió incapaz de atacar la defensa barcelonista.

El Barça empezó a pasar el rodillo, con un acierto más ajustado a su nivel que no el ofrecido en la primera parte. Ndong, que no había aparecido, anotó cinco puntos seguidos (37-30). A un enceste de Wallace tras robar un nuevo balón (39-30) le continuó una antideportiva del jugador barcelonista. El Manresa aprovechó esta circunstancia y devolvió con cuatro puntos un nuevo ajuste en el tanteador (39-34), pero sólo fue un coletazo, el último de este cuarto en el que el Barcelona exhibió su poderío defensivo y anotador, en un momento en el que todos sus hombres encontraron acierto.

En el último cuarto, con un Manresa tocado, aunque con un elevado sentido del espectáculo en acciones individuales, el partido fue fácil para un Barcelona que alcanzó su máxima tras un triple de Sada (70-53).