Noticias en Minnesota, uno de los que equipos que más ruido ha hecho en el verano NBA por el traspaso de Kevin Love a Cleveland Cavaliers, en el que acabaron recibiendo a los dos últimos números 1 de draft en los Timberwolves: Anthony Bennett y Andrew Wiggins. Los dos jugadores canadienses llegan para formar un núcleo joven y que promete mucho especáculo en Minny junto a Thadeus Young, Ricky Rubio y el también rookie Zach Lavine. En Minnesota tienen claras dos cosas: que van a intentar explotar esa explosividad de sus nuevas armas jóvenes, y que Barea no tiene sitio en el nuevo proyecto.

Para abrir boca y arrancar a lo grande la era 'post Love' los Wolves han convocado un concurso de mates en el día en el que estrenan trainning camp: Wiggins y Lavine, dos jugadores de espectacular físico, se retarán ante la que va a ser su nueva afición. Será el 29 de septiembre.

Por otra parte, todo apunta a que JJ Barea tiene las horas contadas en Minnesota. El base puertorriqueño tiene un año más de contrato a razón de 4,5 millones de dólares pero su bajo rendimiento de la última temporada y la llegada de Mo Williams e incluso jóvenes como el propio Lavine o Glenn Robinson III le van a dejar sin sitio en la plantilla. Los Sixers se negaron a recibirle en la operación a tres bandas que llevó a Kevin Love a Cleveland y los Wolves tampoco han podido abrir ninguna operación porque las franquicias creen que, con 30 años, el eléctrico base ha perdido ya parte de la velocidad que le caracterizaba y que es esencial para él por sus escasos 183 centímetros.