El Maccabi de Tel Aviv sacó una mínima ventaja (66-69) ante el Flamengo brasileño en el partido de ida de la Copa Intercontinental, torneo que se decidirá este domingo.

El base estadounidense Jeremy Pargo, omnipresente en todo el juego disputado en el pabellón HSBC Arena de Río de Janeiro, tiró del campeón europeo y fue autor de 21 puntos.

Pargo iluminó al Maccabi en los momentos más complicados del partido, equipo que sufrió más de lo esperado contra el Flamengo, campeón sudamericano, que ha ganado con la reciente incorporación del argentino Walter Hermann.

El club israelí dejó hacer al Flamengo al comienzo del partido y tuvo ciertas dificultades en superar la defensa brasileña, pero tuvo la paciencia suficiente para imponer su oficio, su poderío físico y su superioridad técnica en el tramo final.

En un partido de comienzo a ritmo lento, el club brasileño empezó mejor, más concentrado, sólido en defensa y sobre todo, con más apetito que su rival.

Los que antes del partido esperaban un aplastante dominio del equipo israelí se encontraron con un Maccabi sin la intensidad y las ganas del conjunto que ganó la Euroliga ante el Real Madrid el pasado mayo.

Después del toma y daca del primer cuarto, que sirvió de tanteo, el Flamengo se volcó en la segunda etapa y logró abrir hasta diez puntos de ventaja (33-23) sobre todo con un buen trabajo interior.

En la segunda mitad del partido, el conjunto israelí se vio forzado a despertar y acabó apabullando al conjunto brasileño, que durante todo el tiempo pecó en sus fallos en la línea de tres puntos y fue de más a menos en la intensidad defensiva.

El partido de vuelta se jugará el próximo domingo a las 12.00 hora local (15:00 en España) en el mismo escenario y para remontar, el Flamengo necesitaría de una victoria por una ajustada ventaja de cuatro puntos.