La NBA ha dado conocer esta tarde la primera sanción a un jugador y el afortunado ha sido el escolta de los Minnesota Timberwolves Kevin Martin. El ex de Kings, Rockets y Thunder deberá abonar 15.000 dólares como castigo por realizar un gesto obsceno en el reciente Wolves-Bulls (con victoria in extremis para los de Thibodeau pese a los 33 tantos de Martin).

El gesto en cuestión fue el llamado "Onions" dance que popularizó Sam Cassell. Una celebración que realizó camino de su propio aro tras anotar un triple importante a menos de dos minutos para el final del duelo ante Chicago.