El UCAM Murcia mostró su candidatura seria a meterse en la Copa del Rey. Venció en una de las pistas más complicadas hasta la fecha, la del MoraBanc Andorra. Con un partido muy serio, con mucha concentración y con muchos recursos, los de Ocampo se impusieron a los del Principado, que vivieron en exceso de Trías, en la primera parte, y de un David Navarro espectacular tras el descanso. Antelo, Cabezas, Kelati, Bamforth... los pilares visitantes fueron más y eso decantó la balanza.

El choque arrancó con el capitán del UCAM tirando del carro. Antelo anotaba pero Bivià respondía con rapidez saliendo desde el banco. Un primer cuarto muy intenso, con las defensas como protagonistas. Tras éste, el choque se aceleró pero la igualdad era máxima. Un arreón visitante dejaba el 32-38 al descanso. El Andorra, que llegó a ir 32-31, ya no remontaría el partido. Tras el intermedio, y pese a la lesión, Martín daba descanso a Cabezas (Neto se lesionó en el hombro) para que el malagueño controlase el partido en momentos difíciles. Green se empeñaba en jugar desde el perímetro, Ivanov estaba desaparecido, también Betinho, y Navarro se echaba el equipo a la espalda. Aunque tarde, el alero mantenía con vida a los locales mientras Ocampo rotaba a sus hombres con solvencia.

Ya en el último cuarto Antelo volvió a aparecer y un triple de Bamforth colocaba un 53-63 que parecía decisivo. Sin embargo, Peñarroya ordenó defensa en zona y ésta se le atragantó al UCAM. Las prisas visitantes y los puntos de Navarro apretaban el marcador hasta el 64-68, pero Cabezas frenó el partido, los triples de Andorra no entraron y los murcianos contemporizaron hasta firar el 68-74 decisivo con el que soñar con la Copa del Rey.