Los Memphis Grizzlies lograron ante los Los Angeles Lakers, en el Staples Center, su 24ª victoria de la temporada, la primera de un 2015 clave en el futuro de Marc Gasol. Un triunfo que les mantiene en la tercera posición de la Conferencia Oeste, a dos encuentros y medio del líder, Golden State Warriors; y una actuación que deja al mediano de los Gasol al mismo nivel en el que acabó 2014: sobresaliente.

Fue un triunfo sufrido, el tercero en esta mini-gira de Memphis que ya ha tenido parada alegre en Miami (95-103) y San Antonio (87-95), y que tiene como último peaje la visita de esta noche a los Nuggets, en Denver. Cuatro partidos a domicilio en los que la franquicia de Tennessee no ha podido contar con Zach Randolph, la eterna pareja de Marc, y que tanto el equipo como el jugador español han solventado con enorme acierto. Gasol, eso sí, refleja cierta incomodidad ante la ausencia de su compañero. Dave Joerger ha probado hasta tres soluciones y ninguna, a pesar de los triunfos, parece convencer: ni Jon Leuer, ni Kosta Koufos, ni ese amago de small-ball con Conley, Lee, Allen, Pondexter o Prince rodeando al español. Difícil tarea la de compararse a la mejor pareja interior de la liga.

En el Staples los Grizzlies adolecieron de algo que esta temporada está siendo seña de identidad del equipo: un buen inicio. Dicen las estadísticas que el primer cuarto es su mejor momento: 1,8 de +/-, por el 0,9, 1,3 y 0,7 de los otros periodos. Los Lakers llegaron a ponerse diez arriba en el segundo cuarto (34-24) con un buen juego de equipo, parando a Marc (2 puntos) y a Conley (4), las dos puntas en lanza sin Randolph. Fue ahí, en la máxima angelina, cuando despertó Gasol. Llegó al descanso con 12 puntos y dejó a Memphis sólo cinco abajo. Tras el intermedio los de Joerger se pusieron las pilas e igualaron un encuentro que no se decidiría hasta los últimos instantes.

Dos tiros libres de Marc ponían a los Grizzlies seis arriba a falta de algo más de dos minutos (96-102), pero un genial Ed Davis daba cierto morbo al final. Anotó seis puntos de forma seguida (20 al final)y los Lakers se situaban a dos: 102-104. Una canasta de Prince tras asistencia de Gasol casi cerraba el triunfo visitante: 102-106 a 42 segundos, pero Kobe Bryant se negaba a perder con un sensacional triple: 105-106. Después de dos tiros libres de Courtney Lee que daban ventaja de tres puntos a Memphis, Kobe (15-8-9 hoy) tuvo la posibilidad de mandar el partido a la prórroga, pero falló el triple decisivo.