El Club de Baloncesto Sevilla (fundado en 1987) aún ofrece el décimo presupuesto de la Liga Endesa: 3,8 millones de euros, sólo 200.000 euros menos que en 2013-14, cuando la propiedad oficial aún era de Caixabank. Pero, con sólo tres victorias, el club cierra la Liga Endesa. Y la asistencia media al Palacio de San Pablo ha caído desde 4.061 espectadores en 2013-14 a los 2.773 de la actualidad en Liga: en Eurocopa se va a una sima de 1.103.

La crisis del club se disparó a raíz de la venta (en junio de 2014 y a coste cero) al fondo estadounidense Jefferson Capital, representado por el exagente Jeff Meythaler. Este nombró director ejecutivo a José Luis Galilea. Pese a frenar la marcha a la NBA del letón Kristaps Porzingis (podría ir al próximo draft como uno de los cinco primeros, previo pago de un canon que roza el millón de euros), Galilea se quedó sin Aíto García Reneses. Vino el técnico Scott Roth. Sin licencia española, Roth deja a Audie Norris la dirección en pistas ACB.

Caixa. Por un millón de euros al año, Caixabank mantiene el patrocinio hasta 2017. Observa la crisis con alarma. Meythaler-Jefferson hizo fichajes raros: pero no aporta sus 500.000 euros. Ya interviene Fernando Moral, presidente formal y lazo con Caixabank. Pero...

“La situación deportiva es mala, encaminada al descenso o la desaparición”. Eso dijo el expresidente José Antonio Parra en el portal Muchodeporte.com. Se suceden protestas y ciertas reuniones de viejas glorias ya barajan opciones con el dueño del comodín: Caixabank, claro.