Derrick Rose anotó una suspensión a ocho segundos del final de la prórroga que decidió la victoria de los Chicago Bulls en casa del mejor equipo de la NBA. Esta frase suena a 2011, pero es de hoy, de esta noche, de un encuentro que ya es Top-10 de lo que llevamos de temporada regular (¿alguien dijo que era aburrida?).

Los Warriors comenzaron arrasando, como es costumbre esta campaña, con un Klay Thompson sensacional (15 puntos en el primer cuarto) y cierta renta sobre unos Bulls que se mantenían gracias al acierto de Rose (10) y el oficio de Pau Gasol en la pintura (8 rebotes, 3 de ellos ofensivos). 35-29 al término del primer periodo.

Con Golden State, y más con los ejemplos de los últimos días, siempre tienes miedo a ese vendaval imparable que es el equipo de Steve Kerr en ciertas fases del partido. Ese momento en el que la atmósfera del Oracle Arena hace 'clic' y todo sale a la perfección, como en el tercer cuarto ante los Kings el pasado viernes por la noche. El huracán llegó, pero Thibodeau y los suyos fueron capaces de pararlo a tiempo. Corría el segundo cuarto y estaba en pista la segunda unidad de ambos equipos. Los Warriors, guiados por David Lee, Harrison Barnes, Shaun Livingston y un Klay Thompson al que Kerr devolvió a pista, se pusieron 10 arriba. Quedaban dos cuartos y medio de encuentro, pero Thibodeau sabía que ahí se le podía estar escapando el partido: entraron Rose, Gasol y Hinrich. Parcial de 10-0 y duelo empatado (49-49). Minutos importantes de Mirotic como 3, para acabar con 12 puntos y 7 rebotes en 30 minutos.

La franquicia de Illinois mejoraría en defensa tras el intermedio y la de Oakland se atascaría en el triple, su principal virtud este año. Los Warrios acumularon un 0 de 13 en tiros de tres tras el descanso pero se mantuvieron gracias al buen hacer de David Lee en la pintura, demostrando que es el equipo con más recursos de toda la NBA. El exjugador de los Knicks anotó 11 puntos en el tercer periodo y Chicago sólo pudo ponerse dos arriba (81-79). Kerr supo dónde estaba el punto fuerte de su equipo esta noche y lo exprimió. Se olvidó de tirar de tres y centró el ataque en la zona para ponerse 11 arriba a 9 minutos del final (91-80) con un Lee que llevaba ya 24 tantos.

Reaccionó Chicago, con orgullo de campeón y esfuerzo de Playoffs, demostrando que el físico de algunos de sus jugadores quizás no dé para ser primero del Este pero sí que hay talento para llegar lejos en la postemporada. Rose anotó tres canastas consecutivas (sin contar tiros libres) y los de Illinois se pusieron a uno (99-98 a cuatro minutos). Después de una gran canasta de Draymond Green para aumentar la distancia a cinco (103-98) apareció el mejor Pau Gasol (18 puntos, 16 rebotes y 8 asistencias). Dos asistencias en la zona a Joakim Noah, rebotes y tiros libres para acercar un triunfo que Kirk Hinrich dejó servido con un triple a 15 segundos del final. (107-105). Chicago defendió bien la última jugada y no dejó recibir ni a Stephen Curry (21 puntos al final) ni a Thompson, con lo que se la jugó Iguodala de tres, y falló. En el rebote, eso sí, salió ganador uno de los jugadores con más garra y esfuerzo de la liga: Draymond Green. Un palmeo suyo sobre Noah llevó el partido a la prórroga.

Los Warriors terminaron la prórroga con 2 de 11 en tiros y aún así tuvieron un tiro fácil para forzar la segunda, así que imagínense cómo fue el tiempo extra. Rose (30 puntos) falló tres tiros (dos airballs) antes de anotar la canasta ganadora a ocho segundos del final. Un fadeaway sobre una gran defensa de Klay Thompson (30 y 10 rebotes), que tuvo una cómoda 'bomba' para empatar pero el balón salió despedido después de rodear el aro.

Golden State perdió su segundo partido del año en el Oracle Arena (21-2) pero todavía mantiene el 'título' de mejor equipo de la NBA. Balance de 36-7, por el 37-8 de los Atlanta Hawks. Los Bullls, por su parte, comienzan con alegría una gira por el Oeste que les obligará a hacer parada en Los Angeles (Lakers), Phoenix, Houston y Nueva Orleans.