Los Clippers y Rockets, dos de los gallitos de la Conferencia Oeste, se medieron esta madrugada en el Staples Center sin sus dos hombres interiores de referencia: Blake Griffin en los angelinos y Dwight Howard en los texanos. Finalmente, Houston echó más en falta a su hombre grande (además de pagar las consecuencias de la mala noche de James Harden: 9 puntos con 3/12 en tiros y 0/7 en triples) ante los de Doc Rivers, quienes sumaron su segundo triunfo consecutivo para mantenerse en el octavo lugar de la Conferencia.

Tras un partido nivelado (80-79 al tercer cuarto), los locales dieron el golpe en el último perido, sumando un parcial favorable de 30-16. Momento en el que apareció Jamal Crawford (convirtiendo 12 de sus 20 tantos), pero sobre todo un inmenso DeAndre Jordan. El pívot se ha propuesto hacer olvidar la baja de Griffin y esta madrugada acabó con 24 puntos y 20 rebotes, completando así su segundo 20-20 consecutivo. Brutal. Es más, en el cuarto cuarto consiguió un 11-12 pese a su 7/16 en tiros libres (12/26 a lo largo de la noche). Su cruz. Pero no importa, su técnico no entiende cómo es posible que no esté este fin de semana en Nueva York, en el All Star. "Sin ninguna duda, D.J. debería estar. Todos lo sabemos. Creo que su temporada es una farsa, realmente lo pienso. Un tío que acumula un 20-20 tras otro no es muy normal", destacó el técnico.