Tras más de dos décadas de giros en torno a la idea (exactamente, desde 1994), la NBA aplica una nueva vuelta de tuerca en el llamado Partido de Novatos o Rookie Challenge y que ahora se denomina oficialmente BBVA Compass Rising Stars Challenge. El formato inicial que hacía chocar a novatos o rookies con jugadores de segundo año (sophomores) ya había sido descartado a partir de 2012: todo vino por la habitual superioridad de los sophomores, que aplastaban a los novatos y reducían a la nada el presunto desafío. Entre 2012 y 14, se concedió a dos viejas glorias (Shaquille O’Neal, Charles Barkley, Grant Hill, Chris Webber...) la potestad de seleccionar a su equipo de novatos, bajo reglas ya marcadas. Tampoco funcionó demasiado bien. Y ahora...

En su edición número 21, la que fue Rookie Challenge vuelve a ponerse de estreno (03:00 del sábado en el Barclays Center de Brooklyn) y experimenta con un desafío entre jugadores jovenes de EE UU y del Resto del Mundo (Rest of The World). El gran aliciente es la presencia del español exmadridista Niko Mirotic en el equipo mundial, a las órdenes del neoyorquino Kenny Atkinson (técnico asistente de Atlanta Hawks, que jugó en España). Mirotic no hizo el entrenamiento de ayer a las órdenes de Atkinson, en el Steinberg Center de Brooklyn... porque de madrugada se enfrentaba a los Cleveland Cavaliers con su actual equipo, los Chicago Bulls. Con Mirotic, Antetokounmpo y nada menos que Drew Wiggins (canadiense), el Resto del Mundo arranca como favorito teórico ante un combinado estadounidense dirigido por Alvin Gentry (ayudante en Warriors) y que cuenta con Plumlee, Burke y Zeller... pero ha perdido a Michael Carter-Williams.