Los Sergios del Real Madrid, Llull y Rodríguez, valoran seriamente la posibilidad de abandonar el equipo blanco y marcharse a la NBA, aunque no tendría porque ser al final de esta temporada. Y en el club blanco esperan retenerles al menos un año más en una plantilla que ya ha ganado tres títulos esta campaña y que en la Liga Endesa va camino de sumar el cuarto. Ambos tienen contrato hasta el 2018.

Sobre Llull, principal preocupación de los dirigentes madridistas por el interés de Houston Rockets (poseedor de sus derechos NBA) en hacerse con sus servicios, habló Eduardo Fernández de Blas, vicepresidente segundo de la entidad, en IB3 Televisió: “Le quieren todos, pero los que más le queremos somos nosotros. Sabemos que está muy contento en el club y en la ciudad y haremos todo lo que haga falta para que se quede”.

Sueldos. El menorquín cobra alrededor de 1,5 millones de euros y los rumores hablan de que el equipo texano podría ofrecerle más de 17 millones de dólares por tres temporadas. El año pasado sí la tuvo, pero en 2015 tanto su agente como el Madrid aseguran que no han recibido aún ninguna oferta. Pero podría llegar a partir del 1 de julio, cuando las franquicias estadounidenses puedan ya negociar con jugadores libres. Para marcharse, Llull tendría que abonar al club la mayor parte de su cláusula de rescisión de 5,5 millones de euros. Kevin McHale, técnico de los Rockets, le quiere (“Sería un enorme fichaje”) y la estrella del equipo, James Harden ha pedido “otro base”.

El caso de Sergio Rodríguez es algo diferente. Para el canario, dos años más mayor que Llull (27), se trataría de un regreso (ya estuvo cuatro años en la NBA) con la intención de triunfar en la mejor Liga del mundo, que es el gran anhelo de su carrera. Por eso no aceptaría irse a cualquier equipo ni a cualquier precio. Estudiaría ofertas de franquicias ganadoras que mejoraran su sueldo en el Madrid, que ronda también el millón y medio de euros. La cláusula de rescisión del base está en torno a los 3 millones. Esperar un año más podría ser lo mejor para los Sergios, porque el límite salarial de la NBA aumentará en el verano de 2016 gracias al nuevo contrato televisivo.