Vivek Ranadive, nacido en Bombay y que ha amasado una fortuna a partir de TIBCO, es propietario de Sacramento Kings desde la primavera de 2013. Desde su llegada no ha hecho demasiado por dejar mal a los hermanos Maloof, que llevaron al equipo descrédito deportivo y casi al cambio de ciudad. En el haber de Ranadive está, como uno de sus mayores pecados, la destitución de Michael Malone, su apuesta para el banquillo nada más adquirir la franquicia, en diciembre de 2014 y cuando el equipo empezaba a perfilar un plan con el que parecía a gusto su gran estrella, el no siempre estable DeMarcus Cousins.

Ahora Malone es nuevo entrenador de Denver Nuggets, en los últimos tiempos otro polvorín disfuncional, y desde las Montañas Rocosas ha confirmado lo que fue uno de los rumores más divertidos de la NBA hace poco más de un año, antes del arranque de la temporada 2014-15: Ranadive propuso a Malone defender con cuatro jugadores contra los cinco rivales y dejar un palomero solo en campo rival: “Sí, sucedió. Me lo propuso. A mí, que soy un entrenador de perfil defensivo. No se puede defender como Dios manda con cuatro jugadores…”.

Malone recuerda su paso por Sacramento, donde dejó su lugar a George Karl y a mucho más caos. Tras iniciar la temporada 9-6, la baja de Cousins condujo a unas derrotas que dieron al dueño la ocasión que buscaba para deshacerse de él para sorpresa de todos los que veían jugar a un equipo que empezaba a dar señales de vida con el DeMarcus más maduro de toda su carrera: “En teoría era un plan de cuatro años, estrenar pabellón siendo un equipo de playoffs. Me pareció una propuesta excelente pero luego mi despido me pilló con la guardia baja. Tenía un equipo que creía en mí, que había comprado mi forma de ver las cosas”.