Después de la paliza de los Warriors en The Q, LeBron James no se quedó de brazos cruzados. El alero de los Cleveland Cavaliers aprovechó el momento para empujar, más si cabe, a sus compañeros, pensando en que la temporada es larga y en que aún no ha llegado lo verdaderamente importante. El cuatro veces MVP, que admitió estar "un poco loco" por ser el mejor (Ken Berger, CBS Sports), publicó en su perfil de Instagram una cita del luchador de la UFC Conor McGregor que deja bien claro el momento que está pasando y las ganas que tiene de darle la vuelta a la tortilla. Una obsesión...

"Esto no tiene que ver con el talento, sino con el trabajo duro. Es una obsesión. El talento no existe, todos somos iguales como seres humanos. Podrías ser cualquiera si le dedicas el tiempo necesario. Llegarás a la cima. Eso es así. No tengo talento, estoy obsesionado".

LeBron, que ha perdido cuatro de las seis Finales de la NBA que ha disputado (cuatro con los Heat, dos con los Cavs), es una de esas estrellas del mundo del deporte que, por mucho que triunfen, siempre quieren más. A sus 31 años, El Rey prepara otro viaje a 'sus' Finales, y, como siempre, lo intentará hasta que no pueda más, independientemente del resultado final.