"Llevo ocho años esperando”, dice Laia Palau, que quiere despedirse de la Selección en sus terceros Juegos (estuvo en Atenas 2004 y Pekín 2008). España no hizo los deberes en el Eurobasket de 2011 —eliminada en la segunda fase— y lleva desde entonces soñando con una cita olímpica. Aparte de la veterana, sólo otras tres jugadoras han vivido unos Juegos: Luci Pascua, compañera de Laia en sus dos experiencias anteriores, y unas jóvenes Laura Nicholls y Alba Torrens, que aterrizaron en la absoluta precisamente en el Preolímpico de Madrid, en 2008, con 19 años recién cumplidos. En la cita española también estuvo Silvia Domínguez, pero su lugar en Pekín lo ocupó Nuria Martínez, recuperada a tiempo.

El camino a Río está fijado: los Juegos se sitúan a tres victorias de distancia para un equipo que ha subido al podio cada verano desde 2009, salvo aquel fatídico 2011 que le obligó a disputar el Preeuropeo en 2012. En total, un oro europeo, una plata mundial y tres bronces, uno mundial y dos continentales, para las de Mondelo. Con el Rey Midas al frente, la Selección sólo ha perdido seis partidos desde 2012: los dos del Preeuropeo ante Suecia, la final del Mundial ante EE UU, las semifinales del Eurobasket 2015 frente a Francia y dos partidos de preparación: ante el equipo galo en 2013 y Nueva Zelanda la pasada semana. Ha jugado 69 con un 91,3% de victorias. ¡Casi nada!

Además, Mondelo conoce bien a su rival.  El seleccionador ha hecho carrera en China, donde ha ganado tres anillos con las Shanxi Flame. El país asiático presume de centímetros, con seis jugadoras de 1,90 o más, y es el principal aspirante a la quinta plaza disponible en este Preolímpico. Las otras cuatro, si no hay sorpresas, serán para los equipos europeos que, en principio, liderarán su grupo y tendrán un cruce más fácil. “Sin catarros ni lesiones estaremos en los Juegos”, avisó Mondelo en AS tras ganar el bronce. ¡Salud para España!