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BILBAO BASKET

El Bilbao Basket elige a Duran para sustituir a Sito

El técnico barcelonés se desvinculó del Valencia y, tras un intento de ficharle como ayudante en 2014, a la segunda sí puede ir la vencida en Miribilla.

Actualizado a
Carles Duran.
FELIPE SEVILLANODIARIO AS

El Bilbao Basket no se ha quedado quieto ante los movimientos de Sito Alonso en busca de equipo (Barcelona, Valencia, Bayern de Múnich, Granca…) y ya ha contactado con su deseado sustituto. Aunque también gustaba Ibón Navarro y el bilbaíno Gonzalo García de Vitoria, el elegido es Carles Duran, que se desligó ayer del Valencia, en donde ejercía de segundo y llegó a estar un período de interinidad como entrenador jefe en enero de 2015 tras la destitución de Perasovic. En aquella época tuvo varios episodios ruidosos con los árbitros y algún rival.

Duran se fue del club taronja alegando que quiere emprender un nuevo reto. Y ese es el de regresar a primera línea, a lo que siempre ha aspirado. Casualmente, Duran ya estuvo en la órbita del Bilbao hace un par de años, cuando se lo quiso traer Sito como segundo, pero receló de un club herido de muerte y prefirió una plaza más confortable, así que se contactó con Óscar Lata, que finalmente sí aceptó. El técnico barcelonés tuvo un amargo enfrentamiento con Alonso en el playoff de aquella temporada: “Ahora regresa a casa y se vuelve un corderito”, le espetó, aunque el maño restó importancia al rifirrafe y apeló a su profunda amistad, que toca incluso a las familias.

De 40 años, Duran fue ayudante de Sito Alonso en Badalona y dirigió al CB Prat. Formado en la cantera del Joventut de Badalona, donde también trabajó con Aíto y Pepu, conoce a Mumbrú y Raúl, y ambos han dado su bendición para llegar a Miribilla. Su fichaje se cerrará en breve si nada se tuerce, pero no se puede hacer oficial hasta la desvinculación de Sito Alonso, en un matrimonio que muchos bendijeron hace dos años pero que a cualquiera con dos dedos de frente producía perplejidad por una duración, cinco años, que en basket no se produce ni con LeBron James. Al técnico se le deben tres meses y entre eso, su alta cláusula y el malestar entre las partes, se atisba otra movida en el club de las mil tormentas.