Mike D'Antoni cuenta en Texas con elementos de sobra que pueden correr y lanzar con acierto, ideales para su forma de entender el baloncesto. Los fichajes de Eric Gordon y Ryan Anderson encajan en este sentido en el perfil de una plantilla hecha para anotar sin mirar demasiado atrás. Harden ya ejercía como el verdadero base del equipo, aunque ahora lo será a tiempo completo, según ha asegurado D’Antoni. La pasada temporada promedió 7,5 asistencias por partido (sexto en la clasificación de la liga), a pesar de partir de la posición de escolta. Cubriéndole las espaldas en defensa estará Patrick Beverley, limitado ofensivamente pero buen lanzador de tres puntos, algo en lo que también destaca Trevor Ariza, principal alero del equipo.
Sin Dwight Howard, Clint Capela deberá asumir más protagonismo en intimidación y rebote. A los Rockets no les sobran los kilos y el joven pívot suizo está ante una oportunidad de hacerse un nombre en la liga. Habrá que ver si D’Antoni se decide a jugar con un cinco puro el tiempo suficiente para que sea así. Gordon y Anderson descargaran de trabajo a Harden en tareas ofensivas y le abrirán espacios. Ambos pueden anotar con fluidez. Nené tampoco anda escaso de calidad para hacer daño en ataque, pero con 33 años y un largo historial de lesiones no está para jugar mucho. Tyler Ennis es la alternativa a Beverley como base puro del equipo. Ninguno de los dos es plenamente fiable. Corey Brewer mantendrá un rol importante como alero suplente con la salida de Michael Beasley y K. J. McDaniels, Montrezl Harrell y Sam Dekker pelearán por entrar en la rotación.
D'Antoni recupera en los Rockets la categoría de entrenador jefe tras trabajar como asistente en los Sixers la pasada campaña. Veterano en los banquillos, tuvo su mejor época con los Suns. En Phoenix pasó cinco años (2003-2008), ganando el 65% de los partidos de la Fase Regular. Fue Entrenador del Año en la 2004-05 y alcanzó las Finales de Conferencia en dos ocasiones (2005 y 2006). Tambien ha dirigido a Nuggets (1998-99), Knicks (2008-2012) y Lakers (2012-2014). Su balance total es de 455 victorias y 426 derrotas (51,6%).
La estrella: James Harden
Harden le discutió el MVP de la Temporada de 2015 a Stephen Curry (según votaron los propios jugadores, él debió ser el ganador). Y, tras una temporada irregular de su equipo que le impidió aspirar al galardón en 2016, parte de nuevo como uno de los principales candidatos del nuevo curso. The Beard, la barba, es el mejor escolta de la NBA y una megaestrella de la liga. Sus números no mienten: 29 puntos, 7,5 asistencias y 6,1 rebotes por partido la pasada campaña. Es el jefe incontestable en los Rockets.
