La final de la Liga Endesa pone rumbo a Valencia tras el 1-1 que el WiZink Center (el Palacio de toda la vida) nos ha deparado este fin de semana. El triunfo de los de Pedro Martínez en el segundo partido no solo hace soñar a los taronja con el primer título ACB de su historia, sino que les permite estrenarse en la final de la máxima competición nacional tras cuatro derrotas previas (el 3-0 ante el Barcelona en la final 2003 y el KO del pasado viernes ante el Real Madrid). La primera victoria taronja de la temporada ante los blancos (habían perdido sus cuatro primeros compromisos) hace que la eliminatoria se traslade a La Fonteta con el mismo resultado que en las semifinales de 2015. Entonces, y no sin polémica (el Valencia denunció la alineación indebida de Marcus Slaughter), los de Laso se hicieron con sendos triunfos en cancha contraria que evitaron la disputa de un quinto y definitivo encuentro en Madrid y sellaron su pase para el cruce por el título. ¿Se repetirá el guion?

También hace un año el Real selló la clasificación para su quinta final ACB consecutiva (la cuenta ya va por seis) tras derrotar a los taronja en el cuarto encuentro en su feudo. Los madridistas sí lograron en aquella semifinal sacar adelante los dos partidos como locales y evitar regresar a la capital pese a caer en el tercer envite de la serie en otro duelo polémico (aquella personal de Thompkins atribuida a Llull por error de la mesa).

Precedentes con 1-1

Pase lo que pase ahora, la única certeza es que por tercer año consecutivo el campeón de la Liga Endesa saldrá de la batalla que dirimen Real Madrid y Valencia. Hasta la fecha, y según datos facilitados por la ACB, en 12 ocasiones el playoff final al mejor de cinco partidos cambió de escenario con un 1-1 en el marcador. Unos precedentes que sonríen a los de Pedro Martínez, ya que en 7 de esa docena de ocasiones el trofeo lo levantó el equipo que arrancó la eliminatoria con el factor cancha en contra (caso del Valencia). De hacerlo ante su afición (tienen que ganar el tercer y cuarto partido), se convertirían en el quinto que lo hace con un 1-3. Las tres veces restantes hubo que esperar a un decisivo quinto partido para el 2-3 final. Aunque eso sí, solo un equipo que arrancó la final como visitante logró campeonar tras perder el primer partido y ganar el segundo a domicilio. Fue, precisamente, el Real Madrid hace justo un años tras encadenar tres triunfos consecutivos después de caer en Barcelona en el primer duelo.

En las otras 5 ocasiones que se llegó con 1-1 al primer cambio de sede la ACB fue a parar a manos del equipo en arrancar como local (caso del Real Madrid). Estos siempre lo consiguieron tras imponerse en el último encuentro (3-2). Si los blancos ganan los dos duelos en Valencia serán los primeros que se imponen con 3-1 tras el 1-1 inicial.

El caso del Darussafaka

Los pupilos de Pablo Laso también cayeron ante su público en el segundo partido del playoff de cuartos de la Euroliga ante el Darussafaka. Como ocurre ahora, los precedentes tampoco estaban de su lado. Pero consiguieron rehacerse y sacaron billete para la Final Four de Estambul encadenando triunfos en la pista de los turcos, salvando así el todo o nada en Madrid.