REPORTAJE

Las estrellas no escapan a una temporada repleta de lesiones

Chris Paul, Kobe Bryant, Marc y Pau Gasol, Derrick Rose..., son algunas de las estrellas de la NBA que han sufrido en un curso lleno de lesiones.

0
Las estrellas no escapan a una temporada repleta de lesiones

Las estrellas no son inmunes. Como el resto de jugadores tienen las mismas probabilidades de, que en un partido cualquiera, en un pabellón cualquiera y ante un rival cualquiera, caer lesionados. Su pérdida, con respeto a la clase media, es un drama. La NBA se nutre de su imagen; de sus mates, asistencias y habilidades. Y sus bajas, durante el tiempo que sean, son una mala noticia para la competición y los seguidores del todo el mundo.

Y esta temporada está golpeando con una dureza extraordinaria y, en algunos casos, ofensiva para la clase alta de la liga. Deron Williams (debido a diversas lesiones se ha perdido 16 partidos esta temporada), Rajon Rondo (rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, desde enero de 2013 hasta enero de 2014), Chris Paul (hombro derecho, cuatro semanas), Marc Gasol (esguince en la rodilla derecha, diez semanas), DeMarcus Cousins (esguince de tobillo derecho, 10 días) o Kemba Walker (esguince en el tobillo izquierdo, 10 días) son algunos de los ejemplos. Pero estos, por suerte, han vuelto a las canchas y su regreso ha sido como agua de mayo para sus franquicias en muchos de los casos.

Pero hay otros que será difícil, por no decir casi imposible, volver a ver esta temporada. Con estas palabras a todo el mundo le viene a la cabeza un nombre: Derrick Rose. El base de Chicago Bulls volvió a las canchas tras una larga lesión (ligamento anterior cruzado de su rodilla izquierda) y sólo 10 partidos después de su regreso, cayó de nuevo (menisco de su rodilla derecha). Diferente pierna, diferente lesión, pero mismo diagnóstico: parar lo que resta de temporada. Chicago llora nuevamente su ausencia.

La esencia del retorno triunfal y la vuelta al ‘infierno’ en un breve periodo de tiempo es algo conocido en Los Ángeles y en Oklahoma con Kobe Bryant y Rusell Westbrook como protagonistas, respectivamente. El caso angelino en cuanto a su enfermería es algo muy especial. Sus jugadores entran y salen de forma continua. A parte de Bryant (fractura de la tibia de la pierna izquierda tras su reaparición a bombo y platillo), Pau Gasol, Steve Nash, Nick Young, Jodie Meeks, Jordan Farmar…, han estado en el dique seco y pocos en el equipo se han librado de la quema.

En OKC, de todas formas, son más afortunados. A pesar de la inflamación de la rodilla del base, consecuencia de su lesión durante los playoffs del año pasado, su vuelta está muy cerca.

De todas formas es en Colorado donde sí se tiran de los pelos. Danilo Gallinari (rotura del ligamento cruzado de su rodilla derecha) aún no ha debutado y JaValee McGee (fractura por estrés en su tibia izquierda) y Nate Robinson (misma lesión que el italiano) no volverán a vestir de corto hasta el inicio de un nuevo curso baloncestístico. A esto se une la baja de Ty Lawson (costilla fracturada) en estos momentos. Bajas de primer nivel para un equipo que lucha por volver a recuperar las esencias que poseía el año pasado.

Caso doloroso es el que sufren dos equipos de la Conferencia Este: Atlanta Hawks con Al Horford y Brooklyn Nets con Brook López. Dos pilares que se perderán lo que resta de temporada por problemas que ya padecieron en tiempos pasados. El dominicano vuelve a sufrir un desgarro del músculo derecho pectoral y el pívot la rotura en el quinto metatarsiano del pie derecho que le tuvo K.O. en 2011. En cuanto a los vecinos de Brooklyn, en Nueva York es Andrea Bargani el que es baja indefinida por un desgarró en un ligamento de su codo izquierdo, lo que supone otra piedra en el camino para el internacional italiano en su periplo por la NBA.

En el Este no podemos olvidarnos del novato Nerlens Noel (Philadelphia 76ers). Su rodilla hizo crack durante su etapa universitaria, meses antes del draft en el que estaba destinado a ocupar los primeros puestos. Acabó siendo elegido en el sexto ‘pick’ y traspasado desde New Orleans a los ‘Sixers’ donde todavía no ha debutado.

O la de Larry Sanders. Los Bucks son el peor equipo de la Liga con una clara política de ‘tankeo’ por lo que su ausencia por seis semanas al sufrir una fractura del hueso orbital derecho, no se llora por las calles de Milwaukee.

Al igual que tampoco lo han hecho en las de Indiana con la baja casi eterna de Danny Granger, gracias a la explosión definitiva de Lance Stephenson. Problemas de rodilla y una tendinitis rotuliana, que desencadenó en una lesión en el gemelo izquierdo, no le han permitido disputar más de 32 partidos en las dos últimas temporadas y sólo dos encuentros como titular…y todo ello a la espera de conocer si las rodillas del nuevo pívot 'pacer', Andrew Bynum, le permitirán tener constancia en la rotación.

También en el Oeste hay casos dramáticos. Ryan Anderson (hernia de disco de cuello, podría perderse lo que resta de temporada) y Jrue Holiday (fractura en la tibia de la pierna derecha, baja indefinida) son dos de las bajas más significativas de los New Orleans Pelicans, durante una temporada que con la explosión de Anthony Davis parecía la del asentamiento definitivo de un proyecto perdido desde la marcha de Chris Paul a Los Ángeles.

Kawhi Leonard (se fracturó el cuarto metacarpiano de su mano derecha, cuatro semanas fuera desde el 24 de enero) y Manu Ginobili (estiramiento en los isquiotibiales, baja tres o cuatro semanas desde el 29 del pasado mes), de San Antonio Spurs; J. J. Riddick (rotura del ligamento colateral interno en su muñeca derecha, baja dos meses desde diciembre) de Los Angeles Clippers; Eric Bledsoe (baja indefinida por una operación en su rodilla derecha), de Phoenix Suns; Kevin Martin (fractura en el pulgar de la mano izquierda y, de momento, baja indefinida) y Nikola Pekovic (problemas en el tobillo derecho, se espera su vuelta después del All Star tras estar de baja desde finales de enero), de Minnesota Timberwolves o Nikola Vucevic (segunda conmoción en diez meses, lo que le ha hecho estar parado 10 días por precaución) de Orlando Magic son otros de los grandes jugadores que no han podido escapar de la espiral de lesiones que han azotado a las grandes estrellas de la NBA desde el comienzo de la 'regular seasson'.